El Ayuntamiento afirma que las viviendas de Torre Baró no están en mal estado
Las viviendas de Torre Baró, en el distrito de Nou Barris, no están en condiciones ruinosas. Así lo aseguró ayer el Ayuntamiento de Barcelona, un día después de que la terraza de una de estas viviendas se desplomase y muriese una niña de seis años. "Estas casas no están en tan mal estado como para no vivir en ellas", comentaron fuentes municipales. Parte de estas viviendas son fruto de la autoconstrucción por parte de los inmigrantes que llegaron a Barcelona en los años cincuenta y sesenta.
Sin embargo, un técnico del Colegio de Arquitectos de Cataluña indicó que un suceso de este tipo sólo puede ocurrir "en una construcción no demasiado bien hecha, peor mantenida y conservada en un estado deplorable". La terraza se había construido a modo de techo sobre un garaje en la cual la familia había colocado una piscina portátil con capacidad de hasta 3.000 litros. En ésta jugaban cuatro niños cuando la estructura se vino abajo, provocando la muerte de uno de ellos. Los otros tres sólo sufrieron heridas leves.
Las causas del desplome aún no han sido esclarecidas, aunque los expertos señalan que la piscina suponía una sobrecarga importante. Los Mossos d'Esquadra, por su parte, han abierto una investigación, aunque adelantaron que todo apunta a un simple accidente.
