Los imputados del 'caso Hidalgo' no utilizarán para su defensa la investigación sobre el instructor
La investigación que pesa sobre el magistrado Francisco de Urquía por presuntos delitos de prevaricación y cohecho en el marco del caso Malaya ha arrojado una sombra de interrogantes sobre la instrucción del caso Hidalgo contra el blanqueo de capitales en la Costa del Sol, que dirigía el juez ahora suspendido.
Las defensas de los principales implicados en esta causa aseguraron ayer que no se plantean utilizar la imputación del juez instructor para recurrir o solicitar la nulidad de la investigación por la que el pasado abril fueron detenidas 24 personas vinculadas al despacho de abogados marbellí Cruz-Conde. "No vamos a utilizar la imputación del magistrado para la defensa de nuestros clientes, porque el señor de Urquía está siendo investigado en una causa distinta del caso Hidalgo. Además, desconocemos el fondo de la cuestión y creemos en la presunción de inocencia del magistrado", aseguró ayer un letrado.
Uno de los imputados en esta causa, en la que la policía ha intervenido 92 millones de euros, 553 inmuebles en las zonas más cotizadas de la Costa del Sol y 60 automóviles de lujo, aseguraba ayer no estar sorprendido por la imputación de Urquía, aunque reconoció que el trato que le dio el magistrado suspendido en su interrogatorio fue "muy correcto".
El que hasta el pasado jueves fue titular del juzgado de instrucción número 2 de Marbella será sustituido provisionalmente por uno de sus compañeros de juzgado, como es habitual cuando un magistrado es suspendido de sus funciones.
Está previsto que el juez comparezca mañana ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, que será el que se encargue de su caso, al estar aforado por su condición de magistrado.