El presidente del Gobierno advierte a Rajoy que el PP no recuperará el poder "metiendo miedo"

Como siempre ha ocurrido a José Luis Rodríguez Zapatero, los socialistas extremeños consiguen que el líder del PSOE se sienta más que satisfecho en sus visitas a esta región. A cinco días de las elecciones, el jefe del Ejecutivo carga las tintas sobre los mensajes "catastrofistas" del líder del PP, Mariano Rajoy, para ironizar sobre la España "irreal" que describe. "Rajoy anuncia catástrofes cuando en España lo que está habiendo son avances". Además, en este mitin en el Pabellón Juan Serrano Macayo de Cáceres, en el que se apiñaban más de 10.000 personas, Zapatero advirtió a Rajoy de que "no recuperará el poder metiendo miedo". Es inútil, aseguró. "Los españoles sólo tienen miedo al pasado, y la derecha es el rostro del pasado", apostilló en el mitin con más afluencia que ha protagonizado hasta ahora. Zapatero puso indirectamente en duda el patriotismo de Rajoy y de la derecha. "Querer a España no es gritar más fuerte España; es crear empleo, incrementar las pensiones y ocuparse de los españoles", clamó.

Aunque en la ciudad de Cáceres la situación para la aspirante a la alcaldía, Carmen Heras, no parece fácil en absoluto, la euforia se mantiene porque las encuestas indican que Guillermo Fernández Vara ganará estas elecciones de forma muy holgada, recogiendo en toda su amplitud la herencia de Juan Carlos Rodríguez Ibarra, a quien Zapatero puso ayer como ejemplo de buen gobernante y de haber colocado a Extremadura en una situación de pujanza social y económica, habida cuenta de lo lejos que partía en relación con otras comunidades.

Zapatero desgranó proyectos de futuro para este país y glosó lo que cree que ha hecho mejor. "¿Por qué miente el PP? ¿Mienten porque creen que sólo el miedo va a hacer que recuperen el poder?". Si es así, a su juicio se equivocan. "Los españoles sólo temen volver al pasado".

Pero este acto fue sobre todo un auténtico homenaje de Zapatero a su amigo Juan Carlos Rodríguez Ibarra. El veterano presidente se emocionó con los elogios del presidente del Gobierno. Ibarra pasó el testigo a Guillermo Fernández Vara: "Me voy tranquilo porque Guillermo es mejor que yo".

La jornada sólo tuvo una contrariedad para Zapatero. Ocurrió en Alange, localidad de Badajoz, que Zapatero ha tenido presente toda su vida. Allí nació su abuelo paterno, el capitán Juan Rodríguez Lozano, fusilado por los franquistas por mantenerse leal al Gobierno de la República. El presidente acudió al Ayuntamiento para firmar en el libro de honor acompañado por Ibarra y Fernández Vara. Pronto se vio que no todos los ciudadanos agolpados para verle pasar eran partidarios. Unos le aclamaban, otros le abucheaban, algunos blandían banderas del PP. Pero la situación se complicó más cuando se sumó al grupo de protesta un colectivo con una pancarta con el lema centrales térmicas, no, en rechazo a un proyecto de Iberdrola de instalar en la zona una central de esa naturaleza. Así las cosas, el presidente renunció a pasear por la calle.