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La planta de biodiésel de Alicante inicia las obras "por silencio administrativo"

La polémica que rodea la planta de biodiésel proyectada en el puerto de Alicante dio ayer un giro inesperado. La empresa que promueve la instalación, Biodiésel Alicante, anunció el inicio "en breve" de las obras de construcción de la planta. En un duro comunicado en el que critican la utilización política de esta iniciativa, los promotores defienden que el proyecto ha sido autorizado por la Dirección General de Calidad Ambiental de la Generalitat y por el consejo del puerto de Alicante (donde sólo tres de los 23 miembros se abstuvieron), al tiempo que cuenta con la licencia de obras y actividades, "concedida por silencio administrativo". La empresa solicitó la licencia de obras el 25 de julio de 2006 y sus equipos jurídicos dan por cumplido el plazo en el que el Ayuntamiento debía contestar.

Esta lectura no fue compartida por el alcalde de Alicante, Luis Díaz Alperi, quien tras la inauguración de un colegio público ayer en Alicante aseguró que la empresa puede decir "lo que quiera" pero "de ninguna manera tiene licencia ni favorable ni por silencio administrativo" por lo que, advirtió, no podrá iniciar las obras "mientras el Ayuntamiento no se defina claramente al respecto".

El pronunciamiento de Biodiésel Alicante mostraba el malestar de sus responsables por la instrumentalización política de un proyecto que ha levantado el rechazo de colectivos vecinales en plena precampaña electoral. Los promotores recordaron que el proyecto contaba el 17 de noviembre del año pasado con "todos los informes favorables de los distintos técnicos municipales" hasta el punto de que la resolución favorable de la licencia estaba redactada "a expensas de la firma del Ayuntamiento". Las críticas también alcanzaron a Etelvina Andreu, candidata socialista al Ayuntamiento de Alicante, que recordaron se abstuvo en la reunión del consejo del puerto en la que se dio luz verde a esta planta. Andreu ha mostrado posteriormente su rechazo frontal a la fábrica e incluso esta semana se comprometió a incluir esta postura en el programa electoral con el que se presentará a los ciudadanos, una decisión que Biodiésel Alicante dice entender sólo en clave electoral.

66 plantas en España

Biodiésel quiso comunicar sus intenciones a las plataformas vecinales para insistir después en la seguridad de la instalación. En España, recordó la mercantil, hay 12 plantas de biodiésel, 20 en construcción y 34 en fase de proyecto. También advirtió de las consecuencias económicas que implicaría frenar el proyecto. "Nos preguntamos quién se responsabilizaría de los casi 7 millones de euros ya gastados en este proyecto de Alicante; los más de 40 millones adjudicados a la empresa constructora; de las penalizaciones derivadas por el incumplimiento del contrato de abastecimiento de aceite que supera los 300 millones de dólares (230,4 millones de euros) así como de los millones por los daños, perjuicios y pérdidas de beneficios de dicha paralización".

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