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Reportaje:

Martes de cine con el carné en la mano

Las salas se llenaron ayer de mayores de 60 años seducidos por el nuevo descuento

Daniel Verdú

Les gusta el cine, pero la mayoría no va porque no se lo puede permitir. Ayer comenzó la iniciativa promovida por Comunidad, Ayuntamiento de Madrid y Federación de Cines de España, por la cual las personas de más de 60 años podrán asistir, cada martes hasta marzo, al 95% de las salas por sólo un euro. Y fue un éxito. Los cines del centro de la capital se llenaron de jubilados que, a pesar de la lluvia, quisieron aprovechar la primera de las 16 oportunidades que tienen para disfrutar el descuento. También acudieron a la cita en otras localidades, como Alcorcón, donde un señor preguntaba a otro en la cola de un cine: "¿Y ponen el NO-DO?".

"A ver, ¡los mayores de 60 años que preparen el DNI y el euro, así ahorramos tiempo!", grita el chico de la taquilla del Capitol empuñando un pequeño micrófono. "Dame una para la Juani", le pide la primera señora de la encanecida cola que espera el comienzo de la sesión de las seis. Algunos mantienen una pequeña tertulia sobre películas mientras esperan, otros buscan desorientados la programación.

"Es que no venimos nunca, pero con esto del euro cada martes nos plantaremos aquí", explica Agustina, de 72 años, cogida del brazo de una amiga. Todos encantados, menos la dependienta del bar. "No he vendido nada en toda la tarde. La gente mayor, por lo general, no puede comer estas cosas", dice señalando el arsenal de golosinas y palomitas del mostrador.

Escenas parecidas se repiten en otros cines. En los Callao, unas 30 personas se protegen de la lluvia en la entrada de la sala. Todos mayores de 60 años blandiendo su DNI. "Me parece una idea extraordinaria, pero no está bien que termine en marzo. Deberían instaurarlo para siempre y aplicarlo también al teatro", sugiere Manuel Sala, de 62 años.

En los Ideal, un grupo sale bastante alborotado de ver Pequeña Miss Sunshine. "Muy bonita. Lo hemos pasado muy bien. Hay que ver el tiempo que hacía que no veníamos", confiesa una señora muy animada, pero entristecida por la caducidad de la medida. "No sé si lo habrán hecho porque se acercan las elecciones, pero yo lo que quiero es ir más al cine. Luego ya veremos a quién votamos".

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Sobre la firma

Daniel Verdú
Nació en Barcelona en 1980. Aprendió el oficio en la sección de Local de Madrid de El País. Pasó por las áreas de Cultura y Reportajes, desde donde fue también enviado a diversos atentados islamistas en Francia o a Fukushima. Hoy es corresponsal en Roma y el Vaticano. Cada lunes firma una columna sobre los ritos del 'calcio'.

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