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Un colectivo de médicos reclama a Sanidad que retire un informe a favor de la incineración

Mikel Ormazabal

La Comisión de Médicos y Profesionales de la Salud que se opone a la construcción de la incineradora de Txingudi ha iniciado los trámites para denunciar en los tribunales a los responsables del Departamento de Sanidad que redactaron el informe Incineración de residuos urbanos y salud pública, publicado en agosto de 2004, que concluye que "no existe evidencia científica que haga suponer que la incineración de residuos urbanos suponga un riesgo adicional significativo para la salud de la población". Dicho colectivo, apoyado por unos 500 profesionales, reclama al Gobierno que retire o al menos modifique dicho documento, pues contiene conclusiones "manifiestamente erróneas, sesgadas y contrarias" a las normas comunitarias sobre los efectos nocivos de la incineración en la salud.

Los médicos sostienen que el informe de Sanidad se limita a "compendiar o extractar, sin ningún espíritu crítico, diversos estudios publicados sobre el tema" que han sido "manipulados" y elegidos "poco menos que al azar". El trabajo ha sido redactado además utilizando bibliografía "insuficiente, antigua y sesgada". Estos profesionales aseguran que numerosos estudios internacionales demuestran que las incineradoras modernas "producen cánceres, disfunciones hormonales,... en la población residente en las proximidades".

Por ello, solicitan a la consejería dirigida por Gabriel Inclán que retire el informe "por su manifiesta parcialidad" o que, en su defecto, se introduzcan en el texto los cambios y rectificaciones oportunos "a fin de ajustarse a la legalidad vigente".

Moratoria

La Comisión de Médicos, que dirige el doctor José Cruz Ruiz Villandiego, asegura que es "increíble" que la Diputación de Guipúzcoa y las mancomunidades no hayan considerado "ninguna" opción diferente a la incineración. Critican la decisión de construir una planta de combustión de basuras en Hondarribia para recibir los residuos de este municipio, Irún y Hendaia.

"Es lamentable que la población de la comarca del Bidasoa esté desamparada", deploran los profesionales sanitarios, quienes reclaman una moratoria en la decisión de instalar la incineradora de Txingudi, adoptada, a su juicio, en contra de la mayoría de la población y del Ararteko. "No hay derecho a que coloquen una incineradora tan cerca de la población y además nos traigan la basura de Francia", añaden.

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También lamentan la "manipulación" con la que la Diputación y "ciertos políticos" han gestionado la situación del vertedero de San Marcos con el fin de "imponer mediáticamente la urgencia de construir incineradoras". Los médicos se suman a la manifestación convocada el próximo sábado entre Hendaya e Irún para pedir a las instituciones que estudien otras soluciones a las incineradoras.

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Sobre la firma

Mikel Ormazabal
Corresponsal de EL PAÍS en el País Vasco, tarea que viene desempeñando durante los últimos 25 años. Se ocupa de la información sobre la actualidad política, económica y cultural vasca. Se licenció en Periodismo por la Universidad de Navarra en 1988. Comenzó su carrera profesional en Radiocadena Española y el diario Deia. Vive en San Sebastián.

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