Polémicos Beatles

A John Lennon no le gustaba el jazz: "El jazz es mierda para estudiantes". Ironías del destino, pocos han sido más fieles a la música suya y de los Beatles que los músicos de jazz. Incluso un intérprete tan poco convencional como Bill Frisell les dedica todo un programa. Cierto es que el de Baltimore se trajo a Madrid unos Beatles de andar por casa; que si ahora sonaban a Vivaldi, un poco más tarde recordaban a los Tangerine Dream. Una violinista de flores en el pelo y un curtido intérprete de steel guitar con cara de carretera fueron su única compañía. Entre los tres terminaron convirtiendo el San Juan Evangelista en el salón de estar de su casa. Como suele ocurrir en estos casos, hubo una mayoría que se lo pasó en grande y una minoría que puso el grito en el cielo porque aquello, en su docta opinión, no tenía que ver con el jazz: los críticos. A éstos, ni caso.