La rentabilidad de las acciones del Banco de Valencia supera el 65% en 2004
La junta general de accionistas del Banco de Valencia acordó ayer repartir un dividendo de 0,18 euros por acción y una paralela ampliación de capital gratuita de una nueva acción por cada 50 antiguas, con cargo a los beneficios que obtuvo la entidad en 2004 y que ascendieron a 81,78 millones de euros. Así, la rentabilidad global para el accionista del Banco de Valencia a lo largo de 2004 fue del 65,2%. El valor bursátil de la entidad creció un 63% y el dividendo aporta un 2,2% adicional.
La rentabilidad media de los bancos que cotizan en bolsa fue del 8% a lo largo de 2004, mientras que la rentabilidad media de los valores que cotizan en el índice Ibex 35 fue del 17,4%.
José Luis Olivas, presidente de la entidad, y Domingo Parra, consejero delegado, invitaron a los accionistas a remontarse en el tiempo para comprobar el sostenido crecimiento de su inversión. Olivas explicó que "el accionista que invirtió en Banco de Valencia en 1994 hoy ha multiplicado por más de 9,5 su inversión, cuando, por ejemplo, en el Ibex 35 la hubiera multiplicado por tres... y todo ello sin contabilizar los dividendos y primas repartidos en estos años".
El presidente del Banco de Valencia anunció a los accionistas que a lo largo de 2005 "se abrirán otras 15 oficinas hacia zonas de nueva expansión" que "permitirán al banco estar presente en nueve de las diecisiete comunidades autónomas y superar las 362 oficinas con las que se ha cerrado 2004".
El volumen de negocio del banco superó los 15.000 millones de euros el año pasado.
