'El Periódico de Álava' debía 223.000 euros a la Seguridad Social
La empresa editora de El Periódico de Álava, Impresores Vasco Navarros S.A., tenía en mayo de 2002 una deuda con la Tesorería General de la Seguridad Social de 223.797 euros por cotizaciones no pagadas, cuando el Gobierno le concedió 1,3 millones en ayudas del programa Bideratu del Departamento de Industria. La deuda acumulada correspondía al período entre enero y noviembre del año anterior, 2001, y se debía a cotizaciones tanto de la propia empresa como de los trabajadores, que aquélla no ingresaba. La empresa obtuvo durante la tramitación del expediente de las ayudas de Industria un aplazamiento y el fraccionamiento en tres pagos para una parte de esa deuda, pero otra parte, 73.544 euros, fue considerada "no aplazable" por la Seguridad Social.
La parte de la deuda que la Seguridad Social consideró "no aplazable" es la correspondiente a las cotizaciones de los trabajadores y las de accidentes de trabajo y enfermedad profesional, que ascendía a 73.544 euros. El aplazamiento concedido para los 150.253 restantes los fraccionó en tres plazos de 50.000, que no han llegado a ser satisfechos.
El Gobierno se ha negado durante seis meses a facilitar esta información al PP, que, después de examinar la que finalmente ha enviado, ha vuelto a interpelar a la consejera de Industria, Ana Aguirre, para que aclare extremos que no le satisfacen.
Los populares preguntan a la consejera si le consta que la editora de El Periódico de Álava hubiera ingresado a la Seguridad Social el 25% de la deuda cuyo aplazamiento de pago le concedió. Ese abono era condición imprescindible para que el aplazamiento cobrara valor y debía realizarse en los diez días siguientes a la notificación. El acuerdo de concesión del aplazamiento es del 25 de junio y sólo tres días después, el 28, la dirección de ordenación industrial del ejecutivo firmó la concesión de ayudas por 1,3 millones. El documento de la dirección de ordenación territorial afirma que la empresa ha realizado "el pago de las deudas contraídas con los proveedores", pero nada dice sobre la de la Seguridad Social. Tampoco dice nada el informe de la Oficina de Control Económico de Hacienda que dio el visto bueno a la actuación.
Deuda inaplazable
El PP quiere saber ahora si la empresa efectuó en plazo ese pago del 25% de la deuda renegociada, que debería haber ascendido a 37.500 euros. El grupo popular cree que el Gobierno dio la ayuda por tratarse de un medio afín al PNV y estima que el ejecutivo no ha enviado a la Cámara exactamente los documentos solicitados, ya que el PP pedía certificaciones de que la empresa se encontraba al día en sus pagos a Hacienda y a la Seguridad Social y tal certificación sólo se adjunta en el primer caso, expedida por el director de hacienda de la Diputación alavesa. En el caso de la Seguridad Social, el certificado pedido se sustituye por la comunicación del aplazamiento de parte de la deuda. El escaso margen de fechas entre el acuerdo de la Seguridad Social y la concesión de las ayudas por el Gobierno vasco -25 de junio la primera y 1 de julio la segunda- hace albergar al PP dudas sobre el cumplimiento de la condición impuesta por la Seguridad Social de abonar el 25% de la cantidad aplazada y tampoco cree que se satisficieran los 73.000 euros no aplazables.
La empresa Impresores Vasco Navarros S.A. acumulaba pérdidas de 500 millones de pesetas cuando solicitó por primera vez las ayudas en 2001, pero en esa ocasión retiró su demanda. El 13 de mayo de 2002 volvió a pedirlas. La solicitud la firmó Aitor Alzola, miembro del consejo de administración y también de la ejecutiva alavesa del PNV.
