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TRES MESES DESPUÉS DEL 11-M | La investigación policial y judicial

Siete fugitivos, 14 presos y siete suicidas

Las investigaciones, aún en marcha, han permitido aclarar cómo se prepararon los atentados trasla detención de 48 personas en España y una en Italia

El día que se cierre la investigación sobre los atentados del 11-M, el día que acabe el juicio por el asesinato de 190 personas, ese día, aún lejano, con todo negro sobre blanco, quizás se sepa toda la verdad. Hoy, tres meses después de la masacre, las pesquisas han aclarado las principales incógnitas de la mayor tragedia de España desde la Guerra Civil, sobre todo quiénes la cometieron y cómo. "Nos la colaron y eso siempre estará sobre nuestras conciencias", se lamentan los jefes antiterroristas consultados. Y en muchos casos estuvieron muy cerca, porque algunos de los asesinos del 11-M eran viejos conocidos de las fuerzas de seguridad.

Los servicios antiterroristas, fundamentalmente la Comisaría General de Información de la policía, han detenido a 47 personas, de las que 14 están en prisión, buscan a siete huidos y tratan de aclarar la identidad de uno de los siete terroristas que se suicidaron en Leganés, el 3 de abril.

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SIETE FICHADOS Vigilados tiempo atrás

Al menos siete de los implicados en el 11-M estaban fichados por la policía, la Guardia Civil y el Centro Nacional de Inteligencia. En algunos casos habían sido vigilados, filmados y sus teléfonos intervenidos durante una investigación sobre terrorismo islamista ordenada varios años antes. Esta circunstancia facilitó la neutralización del comando en un tiempo récord y evitó nuevos atentados. Quienes participaron en las pesquisas aseguran que nunca descubrieron indicios del ataque. "No los detuvimos porque carecíamos de pruebas. Si lo hubiéramos hecho habrían quedado en libertad", explican.

Serhane Ben Abdelmajid Fakhet, de 36 años, El Tunecino, presunto coordinador del atentado, autor material y uno de los suicidas de Leganés, fue investigado desde 1995 como miembro de los Soldados de Alá, una célula de Al Qaeda que dirigía Imad Eddin Barakat, Abu Dahdah. En noviembre de 2001 fueron detenidos casi todos sus militantes pero no Serhane. Semanas antes del 11-M fue filmado durante una investigación por blanqueo de capitales por parte de fundamentalistas.

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Rabei Osman el Sayed, Mohamed el Egipcio, 33 años, detenido el martes en Milán como presunto ideólogo del atentado, también había sido vigilado y controlado. Ayer mismo el Gobierno francés negó que éste tuviera planeado cometer un atentado suicida en el metro de París, a pesar de que todo el país sigue en estado de máxima alerta y se advierte a los viajeros del suburbano de que deben comunicar la presencia de cualquier paquete sospechoso. Rabei era la sombra de El Tunecino y atrajo la atención policial cuando en 2002 comenzó a aglutinar a un grupo de integristas. Un caso similar al de Amer Azizi, quien se escapó en 2001 y que presumiblemente participó en el diseño del 11-M.

Quizás la mejor oportunidad de descubrir la trama estuvo en Said Berraj. El 19 de diciembre de 2003, la policía intervino el teléfono al marroquí, al que se identificó gracias a una comisión rogatoria de las autoridades turcas. Berraj, presunto autor material del 11-M, no fue detenido al faltar sus huellas y fotografía. Cuando llegaron desde Turquía, el 9 de marzo, ya había desaparecido de su casa. Kounjaa Abdennabi, Jamal Ahmidan, El Chino, y Jamal Zougam también estaban fichados.

SIETE HUIDOS Búsqueda por todo el mundo

La clave quizás la tenga Amer Azizi, Othman Al Andalusi, considerado uno de los hombres fuertes de Al Qaeda en Europa y a quien se sitúa en la cúspide del 11-M. Su captura se considera prioritaria por todos los servicios antiterroristas mundiales para aclarar la trama de Al Qaeda en Europa. Este marroquí, en paradero desconocido, estuvo en contacto en Estambul con Said Berraj, también huido. Con él habrían participado en el asesinato masivo el argelino Daoud Ouhnane, cuyas huellas dactilares fueron localizadas en la bolsa de basura repleta de detonadores que estaba oculta en la furgoneta hallada en Alcalá de Henares con una cinta coránica el día de los crímenes. También se busca como supuesto autor material a Mohamed Haddad, tetuaní de 37 años, reconocido por una de las víctimas del atentado como el joven que colocó una mochila explosiva. El resto de fugitivos conocidos son Abdelmajid Bochar, el joven que alertó a los suicidas de la presencia policial; Mohamed Belhadj, que alquiló el piso de Leganés, y Mohamed Afalah.

SIETE SUICIDAS Todos en el Anatómico

El 3 de abril, siete terroristas se volaron por los aires en Leganés, asesinando al geo Francisco Javier Torronteras. Los cadáveres de los siete permanecen en las cámaras frigoríficas del Instituto Anatómico Forense. Uno sigue sin ser identificado, pero el resto sí: se trata de El Tunecino, El Chino, Abdennabi Kounjaa, Abdallah; Asri Rifat y los hermanos Rachid y Mohamed Oulad. De estos dos últimos se sabe que son dos hermanos, pero sus restos no están individualizados, por lo que harían falta algún rastro genético de cada uno de ellos (extraído, por ejemplo, de un cepillo de dientes) para saber a qué hermano corresponde cada resto. Sólo se ha reclamado un cuerpo, pero sus familiares no han acreditado suficientemente que eran allegados directos. Los responsables del Anatómico han intentado por todos los medios entregar los cadáveres a sus familias y temen que puedan tomarse represalias contra ellos, como ocurrió en el caso del geo, cuyo cuerpo fue violentado una vez enterrado.

CATORCE PRESOS 47 personas detenidas

La policía y, en menor medida, la Guardia Civil han detenido a 47 personas en España durante las investigaciones. En realidad, son 48 detenidos y 15 presos, porque El Egipcio, detenido en Milán, fue encarcelado ayer por orden de la juez italiana Silvana Petromer. Además, los seis detenidos el miércoles por formar parte, supuestamente, de la trama que facilitó los explosivos al comando seguían ayer en dependencias de la Guardia Civil. Los presos en España hasta ahora son Jamal Zougam, Mohamed Bekkali, Mohamed Chaoui, Abderrahim Zabakh y Basek Ghayoun, considerados autores materiales; también están a la sombra el ex minero José E. Suárez Trashorras (confidente de la policía sobre drogas), Rafá Zuheir (confidente de la Guardia Civil sobre armas y drogas), Fouad El Morabit Anghar (amigo de El Egipcio), Hamid Ahmidan, Abdelilah El Fouad El Akil, Otman El Gnaout, Rachid Adli, Mohamed Bouharrat y Saed El Harrak.

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