"Nuestros cursos están centrados en el interés de las personas"

Ricardo Echepare (Irún, 1941), ingeniero industrial y ex director de la Escuela de Ingeniería Técnica de San Sebastián, suma ya 20 años al frente de los Cursos de Verano de la Universidad del País Vasco. La XXIII edición de los cursos, patrocinados por la Fundación BBVA, se desarrollarán en San Sebastián entre el 21 de junio y el 11 de septiembre y contarán con 90 cursos y seminarios, un 10% más que el año pasado. El presupuesto ha crecido en la misma proporción hasta alcanzar los 1.250.000 euros, pero el número de asistentes se prevé estabilizado en torno a las 6.000 personas.

Pregunta. Usted afirma que los Cursos de Verano de la UPV cuentan con su propia ideología, el conjunto de ideas que les dan sentido.

Respuesta. La ideología de los cursos es su misión. Nosotros hacemos extensión universitaria, formación continua, formación del profesorado, foro de reflexión, y pretendemos contribuir al conocimiento, a la relación entre agentes sociales y culturales, y a transmitir una buena imagen de nuestro país. El segundo elemento de nuestra ideología es que nuestros cursos están centrados en el interés de las personas, no tanto en el conocimiento por el conocimiento, que puede ser una tentación del universitario. Nos centramos en los problemas que tiene uno con la salud, con el entorno, con la economía, con la profesión y en los problemas sociales y políticos que nos afectan a todos como colectivo. Y tenemos los principios clave de la cooperación con más de 50 instituciones, empresas y medios de comunicación, y la mejora continua de la calidad.

P. ¿Cómo plantea la relación de los cursos de verano con la actividad académica de la UPV?

R. Tienen una complementariedad. Pueden hacerlo, bien cogiendo los temas a partir del nivel en que los deja los cursos de invierno o cogiendo otros temas. Cuantan con las ventajas de la flexibilidad y creo que tienen un gran valor el encuentro de profesores. Estamos explorando entrar en la enseñanza reglada de títulos propios de la Universidad. Es probable que este año ofrezcamos algún título propio de la UPV entre los Cursos de Verano y alguna facultad o escuela.

P. ¿En qué área?

R. Estamos pensando en la gestión de organizaciones sin ánimo de lucro, pueden ser educativas o servicios sociales.

P. ¿Tienen los Cursos de Verano de la UPV una cara mundana?

R. No. Nosotros no hacemos ese tipo de cursos. La prueba es que nuestras actividades son estrictamente académica, no incluyen festejos. San Sebastián en verano ofrece oportunidades de diversión suficientes como para que nosotros no nos planteemos entrar en ese terreno. Hubo una época de boom de estudiantes que venían a por los créditos de libre elección y creo que se observaba menos interés en los alumnos, más ganas de pasar el tiempo. Diría que desde hace tres años ha habido un cambio en el perfil del alumnado y cada vez hay gente más interesada. El año pasado hubo un 50% de profesionales, y eso da otro tono.

P. ¿Compiten las universidades de verano entre sí?

R. Evidentemente, compiten. Pero el mayor factor de competitividad de los cursos de verano es la proximidad, sobre todo para los alumnos universitarios. Un alumno que viene de fuera a San Sebastián debe sumar gastos de viaje y estancia. Si tiene un curso similar en una localidad más próxima a su domicilio, se queda. Tenemos censadas [en España] 56 organizaciones de cursos de verano, de las que algunas tienen más de una sede. Hay mucho para elegir, y cerca.

P. Sus previsiones de asistencia son muy prudentes. Seguirán en el nivel de los años anteriores, en torno a las 6.000 personas.

R. Es posible que crezcamos algo, pero sí, estarán en torno a 6.000.

P. ¿Por dónde pueden entonces avanzar los cursos?

R. Yo no creo que crecerá el número de alumnos; oscilará un 10% dependiendo del incremento de oferta. Debemos crecer en el valor de los cursos, en acertar en los temas que, de verdad, le sirvan a la gente para resolver sus problemas. Y no es fácil saberlo. Primero, porque no tienes la posibilidad de hacer un estudio de mercado, y segundo, porque nuestra organización está vinculada a una Universidad que es la que soporta, principalmente, los cursos. Y los departamentos universitarios tienen su propia visión de los temas. Nosotros no programamos lo que queremos, sino lo que propone la Universidad.