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Más de 15.000 personas apoyan a los empleados de Altadis en Sevilla y Cádiz

Las factorías andaluzas de la tabaquera pararon la producción y el transporte al 100%

Los trabajadores de Altadis pararon ayer su actividad en protesta por el plan industrial de cierre y el expediente de regulación anunciado el pasado mes de julio por la compañía. El paro fue generalizado en las plantas de Cádiz, Sevilla y Tarragona, donde el plan será más agresivo, con el cierre de estas dos últimas. En Francia, la participación en los dos centros de Lille y Nantes se cifró en el 90%, según UGT. Por la tarde, más de 15.000 ciudadanos apoyaron a los empleados andaluces de la tabaquera en sendas manifestaciones que recorrieron las principales calles de Sevilla y Cádiz.

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Los 233 trabajadores de la planta de Sevilla, los 80 de la distribuidora Logista y los 60 de Altadis Ventas secundaron el paro, mientras que los 530 de la planta de Cádiz hacían lo propio. "Se ha parado todo, desde la fabricación al transporte", decía la portavoz de los trabajadores de Cádiz, Carmen Pérez. "Sólo los trabajadores de dirección han estado en la planta", añadía Pérez.

Por su parte, Altadis emitió un comunicado cifrando el paro en el 34,3% de sus fábricas, que incluyen además de las citadas andaluzas, las plantas de Tarragona, Alicante, Logroño, Cantabria, Cáceres. Altadis minimizó el paro en sus fábricas de cigarrillos de Logroño y Alicante, e insistió en un comunicado en reiterar "su voluntad negociadora" para alcanzar un "acuerdo beneficioso para todas las partes, como se produjo en el anterior plan industrial".

Por la tarde, y bajo el lema La fábrica de Tabacos no se cierra, Carmen somos todos, más de 12.000 personas (15.000, según los organizadores y 11.000, según la Policía Local) acudieron a la manifestación convocada por los trabajadores de Sevilla. La marcha que recorrió sin incidentes el trayecto entre la Plaza Nueva y el edificio de la Universidad, antigua Fábrica de Tabacos, tuvo como anécdota la interpretación de un fragemento de la ópera Carmen a la llegada al antiguo edificio tabaquero.

Por su parte, en Cádiz, unas 2.500 personas iniciaron la manifestación contra el Plan de Altadis que pretende cerrar el centros de elaboración de puros y la prejubilación, baja indemnizada o el traslado a Alicante de 186 de los 530 trabajadores gaditanos. Los sindicatos encabezaron la marcha, que transcurrió de manera pacífica por la principal avenida de Cádiz, con una pancarta que rezaba Altadis puede matar a la Bahía. No a los despidos.

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A ambas manifestaciones se sumaron, además de los sindicatos convocantes, representantes de todos los partidos políticos, incluido el PP. La presidenta del PP andaluz y alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, acudió también a la manifestación y tuvo que soportar algunos cánticos dirigidos contra su partido. "Esto nos pasa por un gobierno facha", corearon en numerosas ocasiones los manifestantes que criticaron las nefastas consecuencias de la privatización de Tabacalera, dedicida por el Gobierno de Aznar.

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