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Indemnización de 360.000 euros a una paciente por un error médico

Los médicos descartaron operarla porque su estado era irreversible

El Instituto Madrileño de la Salud (Imsalud) ha pactado extrajudicialmente indemnizar con 360.000 euros a una mujer de 30 años que en 1999 sufrió un derrame cerebral que no fue diagnosticado por los médicos del servicio de urgencias del hospital Puerta de Hierro.

La mujer fue atendida por médicos residentes en su primer año de formación, sin que la viera ningún especialista y sin que se le hicieran pruebas diagnósticas, como un TAC, que hubieran permitido detectar la gravedad de su estado. La mujer tiene reconocida una minusvalía del 75%.

Soledad F. V., de 26 años, acudió el 4 de mayo de 1999 a las urgencias del Puerta de Hierro declarando que sufría la peor "cefalea de su vida", según el informe de la inspección médica. También sufría mareos y vómitos. Los médicos, tras hacerle sólo algunas pruebas, le dieron analgésicos y la mandaron a casa. La escena volvió a producirse ocho días después.

"En ambos casos la asistencia médica fue prestada por un médico residente de primer año sin que conste la supervisión de un facultativo adjunto. En ambos casos no se consideró necesario consultar al neurólogo", continúa la inspección del Imsalud.

El 9 de junio, un mes después de la primera visita, los padres y hermanos de Soledad la encontraron inconsciente en su habitación. Trasladada al Puerta de Hierro, Soledad entró en coma. Los médicos "descartaron operarla por considerar la situación irreversible", dice el informe.

Cuando regresó a casa, tras varias semanas en la UCI, Soledad no podía hablar, ni comer ni caminar. "Estaba prácticamente en estado vegetal", recuerda Carmen, su hermana.

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Pese a que los médicos no les daban ninguna esperanza sobre la recuperación, la familia apostó por ella. "Va a fisioterapia, rehabilitación y a la piscina casi todos los días. La atiende un neuropsicólogo y una logopeda", afirma.

Todas estas atenciones han tenido un alto coste para la familia, que ha tenido que hipotecar dos casas. La familia ha firmado con la compañía de seguros del Imsalud un acuerdo por el que éste asume su responsabilidad en lo ocurrido. "Se entregan 360.000 euros como indemnización definitiva por los daños pasados, presentes y futuros derivados de los hechos que dieron lugar a la reclamación", concluye el acuerdo.

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