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ETA desafía la protesta ciudadana y mata a un funcionario de prisiones

Desactivado un paquete bomba contra el decano de los abogados de San Sebastián

El funcionario de prisiones Máximo Casado Carrera, de 44 años, fue asesinado ayer por ETA en Vitoria al día siguiente de que más de 100.000 personas se manifestaran por las calles de Bilbao para exigir la paz y mostrar su rechazo a la organización terrorista. Casado falleció al estallar una bomba lapa adosada a su coche cuando, a las 7.45, se disponía a acudir a su trabajo en la prisión de Nanclares de la Oca (Álava). El lehendakari, Juan José Ibarretxe, pidió una rebelión social contra ETA y respaldó la manifestación convocada para esta tarde por el Ayuntamiento de Vitoria y la Diputación Foral, gobernados por el PP.

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Máximo Casado, el sexto funcionario de prisiones asesinado por ETA, falleció en el acto al estallar un bomba lapa con un mecanismo de activación muy sensible. El artefacto estaba compuesto por entre 1,5 y 2 kilos de un explosivo aún sin determinar. El funcionario asesinado estaba casado y era padre de dos hijos. Tenía 44 años y empezó a trabajar en la prisión de Nanclares hace 15 años como maestro. Actualmente ocupaba el cargo de jefe de servicio y estaba afiliado a Comisiones Obreras. Durante el secuestro del funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara, que permaneció retenido por ETA durante 532 días, Máximo Casado recibió cartas amenazadoras, como otros funcionarios de prisiones. El presidente del Gobierno, José María Aznar, a quien el asesinato le sorprendió en Teherán (Irán), se negó a acortar su viaje con el argumento de que ETA no le marca "la agenda de trabajo". El lehendakari, Juan José Ibarretxe, pidió por su parte una "rebelión contundente" contra ETA en Euskadi. Este nuevo asesinato, el 16º de la organización terrorista desde la ruptura de la tregua, provocó la convocatoria para hoy de nuevas movilizaciones en varias capitales. ETA intentó atentar ayer también contra el decano del Colegio de Abogados de San Sebastián, José María Muguruza, que recibió un paquete bomba. Muguruza llevó el paquete a una comisaría de la Ertzaintza, que lo desactivó.

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