El futuro Consejo de Seguridad Nacional asistirá a Aznar "en la dirección de la guerra"

España contará con un Consejo de Seguridad y Defensa Nacional que "asesorará al presidente del Gobierno en la dirección de la guerra o conflicto armado y en la gestión de crisis". Este nuevo organismo supone una copia casi mimética del Consejo de Seguridad Nacional de EE UU, pues en el mismo se sentarán los vicepresidentes del Gobierno, los ministros de Asuntos Exteriores, Defensa e Interior, el jefe del Estado Mayor de la Defensa y el director del servicio secreto CNI. Así consta en un anejo de la Revisión Estratégica de la Defensa, que no aclara quién será la Condoleeza Rice española.

El nuevo Consejo de Seguridad y Defensa Nacional (CSDN) sustituirá a la Junta de Defensa Nacional, un órgano de carácter preconstitucional y difícil encaje jurídico, ya que tiene como misión asesorar al jefe del Gobierno pero está presidido por el Rey.

A diferencia de la Junta, cuyas reuniones tienen un carácter marcadamente formal, el Consejo será un órgano operativo que no sólo emitirá informes sobre las grandes directrices de la Política de Defensa, sino que se reunirá en caso de conflicto, evitando que haya que improvisar un gabinete de crisis para cada ocasión.

Sin embargo, Aznar no podrá contar con su asesoramiento en la inminente guerra con Irak, ya que su creación requiere la reforma de la Ley Orgánica de Criterios Básicos de la Defensa Nacional de 1980, modificada en 1984. El Gobierno, que ya dispone de un borrador, se proponía enviarlo a las Cortes en enero, pero ha tenido que aplazarlo debido a la actual coyuntura internacional.

Para visualizar el papel que la Constitución atribuye al Rey como "mando supremo de las Fuerzas Armadas" y, a la vez, preservarlo de las decisiones políticas que se adopten, el proyecto prevé que el nuevo Consejo se reúna con carácter extraordinario bajo la presidencia del Rey y con el único fin de "informarle".

A diferencia de la Junta, los jefes de Estado Mayor de los tres ejércitos no formarán parte del Consejo, en el que sólo se sentará un militar: el jefe del Estado Mayor de la Defensa. Aunque la Revisión Estratégica no lo dice, contará previsiblemente con un secretario, que sería el equivalente en España a Condoleeza Rice.

Otra importante novedad del anteproyecto es la desaparición de la Junta de Jefes de Estado Mayor o Jujem. En su lugar, se crea el Consejo Superior de las Fuerzas Armadas, bajo la presidencia del ministro de Defensa.

Del Consejo Superior formarán parte los cuatro miembros de la cúpula militar, pero a sus reuniones podrán incorporarse "otras autoridades civiles o militares" del Ministerio de Defensa, por lo que no será un órgano exclusivamente militar y se parecerá más al actual consejo de dirección del departamento, del que son miembros el secretario de Estado o el subsecretario.

El proyecto refuerza el papel del ministro de Defensa, quien "dirige la actuación de las Fuerzas Armadas bajo la autoridad del presidente" y no por delegación suya, como hasta ahora. También sale reforzado el jefe del Estado Mayor de la Defensa quien, "bajo la dirección" del presidente y del ministro, será el Comandante Operativo de las Fuerzas Armadas y contará con el auxilio de un Mando de Operaciones.

En el horizonte del 2015, la Revisión Estratégica fija para el Ejército de Tierra el objetivo de poder mantener simultáneamente y por tiempo indefinido dos brigadas con sus apoyos en dos escenarios alejados entre sí; o una división en misión de combate durante de seis meses. La Armada debe ser capaz de mantener durante dos meses un grupo de combate con un portaaviones y una brigada de Infantería de Marina; así como dos fragatas, dos cazaminas y dos submarinos en operaciones distintas por tiempo indefinido. Finalmente, el Ejército del Aire debe poder desplegar dos escuadrones de aviones de combate en dos teatros diferentes; así como de transportar un grupo táctico del Ejército a 3.700 kilómetros en seis días.

Según la Revisión, las Fuerzas de Seguridad del Estado y las policías autonómicas, así como las locales, colaborarán a la defensa "mediante la normativa de coordinación que posibilite la integración y eficaz participación de dichos cuerpos".