ELA aprueba reclamar este año una subida salarial mínima del 6%
El sindicato nacionalista ELA reclamará en la negociación colectiva de este año, para la que prevé una "alta confrontación", incrementos salariales en torno al 6% (el IPC del año pasado, que se prevé estará en el orden del 4%, más dos puntos). La primera central vasca reunió ayer en Bilbao a su Comité Nacional para aprobar sus criterios ante la negociación colectiva, que afectará este año a 300.000 trabajadores en el País Vasco y Navarra, de ellos, más de 225.000 en Euskadi.
Su secretario general, José Elorrieta, subrayó que esta propuesta no es un objetivo de partida para negociar después a la baja y que las peticiones de subida salarial serán "mucho más altas" allí donde se aprecien mayores discriminaciones, una situación que afecta sobre todo a jóvenes y mujeres. "La gente vive de su salario y nuestra organización tiene que defender el salario de la gente", destacó.
La central nacionalista incluye también en sus planteamientos para la negociación reducciones sustanciales de la jornada de trabajo con el objetivo de las 35 horas semanales, aumentos de empleo fijo, la lucha contra la temporalidad, supresión de horas extraordinarias, impulso a los contratos de relevo, mejoras en la seguridad laboral y medidas para erradicar las dobles escalas salariales, la discriminación y el abuso en la subcontratación.
Durante este año se tienen que negociar convenios sectoriales como los de metal, papel, limpieza de edificios, hostelería y comercio metal en Guipúzcoa. En Vizcaya, entre los más importantes se encuentran los de construcción, sanidad privada y prefabricados y en Alava destacan los de limpieza de edificios, derivados de cemento, comercio metal y hostelería. A ellos hay que sumar las 250 empresas del País Vasco y Navarra que deben negociar sus propias condiciones laborales.
Respecto a la unidad de acción y las posibles alianzas sindicales para la negociación, Elorrieta afirmó tajante que sólo aceptarán acuerdos bajo la premisa de que se establezcan "los mínimos firmables" y que haya un compromiso de que no se produzcan "deslizamientos unilaterales".
