_
_
_
_
_

Sin acuerdo en la huelga de recogida de basuras de Sabadell, que llega al séptimo día

Los basureros rechazan acogerse a un laudo de la Generalitat

No hay acuerdo. Tras siete días de huelga, ayer los basureros de Sabadell se sentaron a negociar por primera vez con la dirección de la empresa concesionaria del servicio de recogida de basuras, Serveis Medi Ambient, SA (Smatsa). Pero ninguna de las partes cedió. Huelguistas y dirección abandonaron la reunión con las manos vacías.

Que el acuerdo sería complicado era algo que empresa, trabajadores y Ayuntamiento de la ciudad, controlado por los socialistas, venían anunciando desde el primer día en que estalló el conflicto. Por ello, el consistorio solicitó el pasado miércoles un laudo al Departamento de Trabajo de la Generalitat. El Gobierno catalán sólo interviene en los conflictos laborales cuando éstos afectan a los servicios públicos y en los casos en que trabajadores y empresa no son capaces de llegar a un acuerdo.

Ayer el Ayuntamiento de Sabadell volvió a reclamar la intervención de la Generalitat argumentando que seguía habiendo 'una acumulación creciente de desperdicios'. Los basureros cumplen los servicios mínimos, que exigen la retirada de la basura orgánica cada 48 horas, pero todo parece indicar que este lapso es insuficiente y se acumulan los desperdicios. En estos momentos el Ayuntamiento calcula que hay 'unas 420 toneladas de basuras' repartidas por la ciudad y prevé que la acumulación aumente de forma progresiva, con el consiguiente 'riesgo para la salud'.

El Ayuntamiento de Sabadell informó ayer a la Generalitat de que se habían producido algunos 'actos vandálicos', como el incendio de 20 contenedores y el vertido de papeleras y contenedores. La última vez que el Gobierno catalán dictó un laudo fue el pasado mes de mayo, durante la última huelga de autobuses de Barcelona, en la que no se cumplieron los servicios mínimos. La Generalitat prefiere no intervenir a no ser que sea absolutamente necesario porque considera que este tipo de intervención 'no deja contentos ni a unos ni a otros'.

Los huelguistas reivindican una jornada laboral de 35 horas y un aumento salarial del 8%, unas demandas 'difíciles de asumir', dice la empresa, porque 'no trabajar el fin de semana es inaceptable', a juicio de la dirección. Por su parte, Vicente Peral, portavoz del comité de huelga, considera que 'la empresa está estancada y no quiere negociar'. Según Peral, los trabajadores están dispuestos a rebajar sus demandas y negociar, 'pero no a retroceder y perder los derechos adquiridos desde hace años, que es lo que quiere la empresa'. Este retroceso, añade el portavoz sindical, consistiría en 'dejar de tener 26 sábados de fiesta y la reducción de incentivos'. Peral asegura que el comité ha pedido a la empresa que al menos acepte debatir sus posiciones.

La dirección de la concesionaria acusa a los trabajadores de tener 'una actitud intransigente e inflexible'. Aun así, la empresa 'no da por cerradas las negociaciones' y se volverá a reunir próximamente con los trabajadores. La dirección de Smatsa asegura que el comité no ha variado las peticiones que llevaron a la huelga indefinida el pasado 4 de septiembre. 'No hay ninguna contraoferta. Sin ningún cambio es muy difícil llegar a un acuerdo', aseguró la empresa.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Los trabajadores no contemplan con buenos ojos que la Generalitat acabe dictando un laudo. 'Preferimos que no, siempre es mejor que sea algo negociado, más que impuesto', dijo Peral. 'Sería preferible que la empresa hiciera algún tipo de aportación más acorde con lo real, porque hasta el momento había algunos elementos que ni los podía implantar', añadió, 'si hubiera algo tangible sobre la mesa para continuar hablando o llegar a un acuerdo, los trabajadores no tenemos ningún problema en desconvocar la huelga'.

El teniente de alcalde de Vía Pública del Ayuntamiento de Sabadell, Joan Carles Sánchez, ha pedido al director general de Relaciones Laborales de la Generalitat, Jaume Abat, que intervenga y se dicte un laudo que obligue a ambas partes y ponga fin al conflicto.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_