Clos quiere que la Guardia Urbana se dedique más a tareas de seguridad y tenga competencias como policía judicial
El alcalde de Barcelona, el socialista Joan Clos, no quiso quedar fuera del debate sobre la inseguridad y propuso ayer que la Guardia Urbana dedique más horas a tareas de seguridad y que las administraciones autonómica y central reconozcan las competencias de los policías locales para actuar como policía judicial. 'Necesitamos incrementar los mecanismos de coordinación policial y las dotaciones para que no haya desequilibrios territoriales', dijo Clos. Y aseguró que los agentes de la Guardia Urbana aumentaron del 9% al 35% las horas que dedican a la seguridad.
Para cubrir las necesidades de la región metropolitana, el alcalde cifró en 9.500 agentes el número mínimo de policías. Entiende Clos que no puede haber menos de dos policías en la calle por cada 1.000 habitantes.
El alcalde cuestionó el discurso del PP cuando relaciona inmigración con delincuencia y reclamó al Gobierno central reformas y mayor presupuesto para mejorar los sistemas de seguridad y de justicia.
Durante la argumentación de su propuesta, presentada ayer en la Fundación Carles Pl i Sunyer, Clos reconoció un aumento de los delitos. Así lo refleja la encuesta de victimización, que mide la sensación de seguridad o inseguridad de los ciudadanos. Esta sensación ha pasado del 14% al 16% en los últimos dos años. Es decir, 16 de cada 100 personas consultadas declararon haber sido víctimas de un delito o conocer algún delito cometido en su entorno. En la encuesta no están incluidos los delitos cometidos contra turistas y personas que residen fuera de Barcelona, ya que se realiza en unos 20.000 domicilios del área metropolitana.
El alcalde atribuyó el repunte de la delincuencia a los menores organizados en bandas y los reincidentes. Por ello, pidió que se modifique el Código Penal para penar la reincidencia y reformar la Ley del Menor.
