La familia de Pacheco pide a la juez que los acusados vuelvan a prisión
La acusación cree que le golpearon 'con saña'
El abogado de la familia de Wilson Pacheco ha solicitado a la juez que rectifique la decisión adoptada la semana pasada y que ordene el reingreso en prisión de los dos vigilantes y el portero implicados en la muerte del inmigrante ecuatoriano, ocurrida el 27 de enero en el Maremàgnum de Barcelona. La magistrada María Asunción González Ferrero consideró en su día que la actuación de David Gascó, Mariano Romero y Antonio Fernando Quincoces era distinta de la que mantuvo el cuarto acusado, James Anglada, quien reconoció haber arrojado al agua a Pacheco. Anglada se entregó a la policía el pasado jueves, el mismo día en que el resto de los acusados pagaron 6.000 euros (un millón de pesetas) de fianza para salir en libertad.
Jordi Galdeano, abogado de la familia de la víctima, invoca la declaración de Anglada para pedir a la juez que dé marcha atrás y que vuelva a encarcelar a los otros tres acusados. Recuerda la acusación que, según Anglada, todos golpearon al ecuatoriano y uno de ellos le dijo que lo lanzara al puerto 'para darle un remojón'. Igualmente, Anglada declaró ante la juez que ninguno de sus acompañantes hizo nada para evitar el trágico desenlace ni para socorrer a la víctima. Después, sigue relatando Anglada, 'nadie dio aviso de que había un hombre en el agua' y 'se marcharon todos del lugar tras mirar al agua'.
Por este motivo, la acusación considera que los vigilantes y porteros actuaron con un 'concierto criminal' y que, como mínimo, se les debe acusar de homicidio doloso. La juez instructora, sin embargo, sólo les acusa de no impedir que se produjera un delito, algo que el Código Penal sólo castiga con un máximo de dos años de prisión. La fiscal del caso, Rosana Lledó, por el contrario, consideraba que los tres eran responsables de un delito de homicidio por omisión, algo que se castiga con penas de entre 10 y 15 años de cárcel. Por ese motivo, la fiscalía se opuso a la libertad.
La acusación recuerda que Anglada ya admitió sin reparos que fue él quien arrojó a Pacheco a las aguas del puerto y que, por tanto, no acusa 'a diestro y siniestro' al resto de implicados como hicieron éstos con él desde el primer momento.
'Entrenadas para golpear'
El recurso del abogado de la acusación afirma que, una vez que los cuatro acusados alcanzaron a Pacheco, 'le golpearon con saña, utilizando los puños, las porras de goma y las patadas, hasta el punto de fracturarle la nariz'. Posteriormente, asegura el abogado de la familia, Anglada levantó a Pacheco del suelo 'y con el consentimiento de todos los intervinientes' le hizo caminar por la pasarela y 'en estado de semiinconsciencia' le arrojó al agua.
El abogado Galdeano añade en su escrito que los dos vigilantes y los dos porteros son 'personas que han sido entrenadas para golpear primero y preguntar después, en un remedo del salvaje oeste'. En su opinión, todos ellos orquestaron un plan para 'cubrirse las espaldas', aunque al final incurrieron en contradicciones.
La juez ha rechazado que la Autoridad Portuaria ejerza la acusación en el caso.
