_
_
_
_
_

El delegado en Valladolid sólo avisó a la Iglesia del 'agujero'

Javier Valenzuela, ex delegado de Gescartera en Valladolid, aseguró ayer que el Arzobispado de Valladolid llegó a tener 1.100 millones de pesetas en Gescartera gracias a frecuentes y sistemáticos ingresos de cheques al portador, de unos 15 o 20 millones de pesetas cada vez, que él iba a recoger a la oficina del económo, Enrique Peralta, cada 15 o 20 días.

Valenzuela admitió que sólo recomendó al Arzobispado, su mejor cliente, que sacara el dinero, 'unos 1.100 millones', y que lo ingresara inmediatamente en otro banco 'y pidiera confirmación'. No avisó del fiasco al resto de los clientes, ni siquiera a la ONCE, a la que había captado, según dijo, a través de José Manuel Pichel, a quien 'conocía de Valladolid'.

Más información
Rato precisa que "en este momento" no se plantea dimitir por Gescartera
Jaime Morey confirma que Luis Ramallo medió en la venta de la agencia de valores

Valenzuela , quien antes de llegar a Gescartera fue ex director general de Economía del Gobierno de Castilla y León durante el mandato de José María Aznar y fue condenado por prevaricación en el caso de la minería, arrancó su comparecencia en el Congreso con una declaración en la que relató cómo el 29 de marzo de 1999, cuando el entonces inspector de la CNMV David Vives tenía abierta una inspección a Gescartera, Antonio Camacho fue a Valladolid y le pidió una entrevista con su mejor cliente: el Arzobispado de Valladolid. Camacho les dijo que la CNMV les reclamaba para una reunión en Madrid y recomendó al ecónomo que no fuera. Valenzuela, según dijo, le recomendó al ecónomo que acudiera a Madrid. El día 30, por la mañana, Valenzuela relató una reunión en la sede de Gescartera, en la calle Moreto, en la que Camacho le pide que cuente en la CNMV que los extractos de los clientes se confeccionaban en las delegaciones. Valenzuela se negó 'rotundamente' porque él 'no simula nada' y presentó la dimisión.

Simulaciones

Pero, pese a ello, Valenzuela fue con Camacho a la reunión en la CNMV, a las tres de la tarde de ese día. Allí, según su relato, Camacho vuelve a intentar, en presencia del ecónomo y de los inspectores de la CNMV, que Valenzuela asuma que los extractos se elaboraban en las delegaciones y que lo que Gescartera enviaba desde Madrid eran 'sólo simulaciones'. Tras la reunión en la CNMV, Valenzuela mantiene que le dijo al ecónomo: 'Don Enrique, yo he presentado la dimisión', y le aconsejó que sacara 'al día siguiente' el dinero y lo colocara en otro banco. Su argumento fue que él 'no vio nada raro' y que sólo dimitió porque Camacho había intentado que 'mintiese', lo que no hace 'nunca'.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_