_
_
_
_

Peñíscola rechaza el plan de Serra d'Irta y apuesta por el turismo y las urbanizaciones

El Ayuntamiento de Peñíscola dio ayer a conocer su plan alternativo al proyecto de la Consejería de Medio Ambiente para proteger la Serra d'Irta. El pleno aprobó por unanimidad de todos los grupos (PP, PSPV, UV e independientes) una serie de alegaciones encaminadas a modificar el plan del consejero Fernando Modrego para evitar una protección que desde el consistorio se considera que perjudica al desarrollo urbanístico y turístico de Peñíscola.

Así lo refleja el documento de alegaciones, en el que se pide que la Serra d'Irta se declare paraje natural, figura que comportaría una protección menos estricta y más acorde 'al desarrollo turístico' de Peñíscola que la de parque, declaración que busca la consejería. El documento considera 'abusivas' las medidas de la zona de protección, y propone una nueva delimitación, en la que los barrancos Volante y San Antonio y las urbanizaciones Font Nova y Atalayas serían los límites. El texto del Ayuntamiento pide que la construcción de urbanizaciones se pueda realizar a 100 metros del litoral, tal y como contempla la Ley de Costas, y no a 200, la medida que refleja el plan de Medio Ambiente, porque, según recoge el escrito 'se desclasifican muchos terrenos urbanizables y sin especies interesantes para su protección'.

En el pleno también se calificó de 'paupérrima' e 'irrisoria' la cantidad de 300 millones de pesetas prevista por Medio Ambiente para el mantenimiento y potenciación de la sierra, y se estiman en 5.000 los millones necesarios a tales efectos. Se trataría, en definitiva, de poner en marcha un programa de subvenciones destinadas a la adecuación de los caminos, señalización o publicidad, así como para indemnizar a los propietarios a los que se les restrinjan sus actividades tradicionales.

Este texto se presentó en el pleno después de ser consensuado y debatido durante varias semanas en una comisión de seguimiento formada por los representantes de todos los partidos políticos, el empresariado, y los sectores de la caza y la pesca.

Más protección

Por su parte, Ecologistas en Acción presentó ayer sus alegaciones al plan de Medio Ambiente para aumentar la protección en la sierra. Los ecologistas solicitan la creación de zonas de influencia marina alrededor de la reserva propuesta desde Cala del Volante en Peñíscola a Cala Mundina en Alcossebre. Entienden que estas zonas impedirían la destrucción de amplias zonas litorales, aplicándose, de este modo, el mismo criterio que el otorgado a la zona terrestre.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_