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Tensa situación en Miami tras la llegada de las abuelas de Elián

Las abuelas de Elián González, en un nuevo giro espectacular del culebrón protagonizado involuntariamente por el niño balsero, viajaron ayer desde Nueva York a Miami, con la intención de reunirse con su nieto. Pasada la medianoche, el encuentro no se había producido. Raquel Rodríguez y Mariela Quintana permanecían en un aeropuerto de Miami y se negaban a desplazarse a la casa de sus familiares exiliados, en el barrio Pequeña Habana, en la que vive Elián desde que, a finales de noviembre, fue rescatado frente a las costas de Florida. Raquel Rodríguez y Mariela Quintana pedían que el encuentro, que había sido negociado por el Consejo Nacional de las Iglesias, el organismo religioso neoyorquino que apadrina su expedición estadounidense, y el departamento de Justicia que dirige Janet Reno, se produjera en un "lugar neutral". Les atemorizaba desplazarse hasta la Pequeña Habana, el corazón del movimiento anticastrista.

Lázaro González, tío abuelo del niño balsero, reiteró a medianoche que sus parientes eran bienvenidas a su casa, donde les esperaba una cena de paella y lechón asado y donde podrían reunirse con Elián. La familia de Miami deseaba una "reunión familiar", sin presencia de periodistas o del Consejo Nacional de las Iglesias. Aseguraba que, en ese marco, las abuelas podrían escuchar de boca de Elián su deseo de quedarse en Estados Unidos. El tenso tira y afloja era retransmitido en directo por las cadenas de televisión y radio hispanas de EEUU.

Manifestantes anticastristas

Detrás de severas barreras policiales, unos 300 exiliados cubanos rodeaban la casa donde permanecía Elián con su familia de Miami. Llevaban banderas cubanas y estadounidenses y, "como gesto de amor hacia las abuelas", exhibían numerosas flores. No obstante, un par de personas fueron detenidas por la policía. Una era un hombre que llevaba una pistola, para la que tenía licencia, y que, según se comprobó, no tenía nada que ver con el asunto. La policía le puso en libertad y pidió que se alejara de la zona.

El otro detenido fue el conocido activista del exilio Diego Tintorrero, que fue detenido por oponer resistencia a la policía. A primera hora de la madrugada de hoy no se sabía si el encuentro, si es que llegaba a producirse, se celebraría en la casa donde vive Elián desde noviembre o en "un lugar neutral". Y tampoco se sabía si las abuelas regresarían o no de inmediato a Washington o Nueva York. Cabía incluso la posibilidad de que se marcharan directamente a Cuba.

Pero la situación puede complicarse aún más de prosperar la iniciativa de varios legisladores republicanos de presentar esta semana en el Congreso una ley para que le sea concedida a Elián la nacionalidad norteamericana. Al conocer esa iniciativa, Raquel Rodríguez, la abuela materna del pequeño, declaró ayer en una entrevista con NBC: "Por favor, no nos hagan sufrir más".

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