Seis bomberos heridos leves al controlar un vertido de sosa cáustica en Alicante
Seis bomberos resultaron heridos leves en el transcurso de los trabajos para controlar un derrame de sosa cáustica ocurrido en el interior de la fábrica de aluminio Alcoa (antigua Inespal) de Alicante en la tarde de ayer. Cinco de los heridos sufrieron pequeñas quemaduras por salpicaduras de la sosa, y el sexto problemas respitarios por inhalación de vapores. Todos los heridos fueron atendidos en el mismo lugar por el Servicio de Atención Médica Urgente (SAMU) sin que fuese necesario su ingreso en centro hospitalario alguno aunque requerirán vigilancia domiciliaria, según indicó un portavoz del Parque Municipal de Bomberos. "Sólo sufrieron pequeñas irritaciones por las salpicaduras de la sosa", dijo el portavoz. "Se les curó en el lugar y continuaron desarrollando su jornada laboral", añadió. El accidente se produjo alrededor de las 16.00 horas en el interior de la fábrica, cuando los operarios de la industria intentaban un trasvase de sosa cáustica diluida en agua de una cisterna a otra. Un fallo en una válvula causó el derrame de unos 400 litros del producto corrosivo. Dado que la fábrica se encuentra en pendiente y a unos 200 metros de la carretera nacional N-332, el vertido amenazaba con llegar hasta la calzada. Para evitar este extremo y una mayor dimensión del accidente, la dirección optó por recurrir a la ayuda de los bomberos. Los bomberos lograron frenar el derrame de sosa, que llegó hasta el arcén de la carretera, mediante la construcción de un muro de arena y la aplicación de un producto absorbente llamado sepiolita. Los restos de la sosa fueron depositados en un contenedor a la espera final de la decisión de los técnicos de Medio Ambiente, que en colaboración con el personal de la factoría determinarán el destino final de la casi media tonelada de residuos tóxicos.
