CECILIA LAVILLA BERGANZA SOPRANO "Mi madre fue la que más se empeñó en que fuese cantante"

Ser hija de Teresa Berganza ha determinado la vida profesional a esta joven madrileña de 32 años que se ha criado en un ambiente familiar presidido por la música y el bel canto. "Hace cuatro años empecé a estudiar con Isabel Penagos y con mi padre, y desde hace dos he empezado a cantar en escena, en donde he tenido la oportunidad de hacer cosas muy interesantes en mi corta carrera", señala. Considerada como una de las mejores voces jóvenes del panorama lírico español, ofreció recientemente en Vitoria un recital dentro del programa de Música de Navidad en el que estuvo su madre como espectadora, "ya que quiere acompañarme y apoyarme siempre que pueda". Pregunta. ¿Qué influencia ha tenido su familia en que se haya decantado por la lírica? Respuesta. Realmente estoy rodeada por un cuarteto magnífico que lo forman Isabel Penagos, mi maestra de técnica; mi padre, con el que he estudiado repertorio; mi madre, que me apoya en todo momento, y mi cuñado, que es pianista. Siempre lo he vivido desde pequeña y es un mundo en el que son fundamentales los buenos consejos. P. Las influencias familiares pueden ser negativas. R. En mi caso no. Me he criado en ese ambiente y todo lo que lleva es en mi favor. Fue mi madre la que más se empeñó en que lo hiciese. P. ¿Cuándo decidió dedicarse profesionalmente a la música? R. Hace muy poquito. Cuando eres más joven te pesa mucho el nombre y lo ves de otra manera. El único problema parte de la comparación, que lleva a que te exijan más y demasiado pronto. P. ¿Ha sufrido el problema del acceso de los jóvenes a la escena musical? R. Yo he empezado hace poco a cantar en escena y lo que sí he notado es que hay que hacer un cierto trabajo de promoción personal. Hay que moverse mucho y tener interés, pero eso ocurre en cualquier otra profesión. En este sentido, las comunidades autónomas están haciendo una gran labor a través de la organización de festivales y conciertos en sitios más pequeños. En esta profesión somos muchos, pero se están haciendo cosas interesantes. P. ¿En qué terrenos de la lírica se halla más cómoda? R. Creo que hay que ir despacio y marcando los pasos dentro de los campos que se abren. El recital ayuda muchísimo, porque te da mucha seguridad. Estás tú sólo con el pianista, y para empezar está muy bien. No me quiero cerrar a ninguna especialidad, y aunque me encantaría hacer ópera, por ahora sólo puedo hacer papeles pequeños. Me encuentro cómoda cantando y tengo que reconocer que lo disfruto, no lo sufro. P. ¿Cómo ve que los cantantes líricos hagan incursiones en otros estilos musicales? R. Respeto a los demás, pero quiero seguir unas reglas. No creo que yo lo haga en el futuro.