La Comunidad prohibirá dar muerte con puntilla a las reses de los encierros
La Consejería de Presidencia pretende dar el puntillazo legal a la puntilla. Este departamento regional, que dirige Jesús Pedroche, está dispuesto a aceptar la propuesta que le ha presentado la Asociación Nacional para la Protección y el Bienestar de los Animales (ANPBA) para modificar el Reglamento de Espectáculos Taurinos Populares y acabar con la "inhumana" práctica de matar con puntilla (un puñal corto) a las reses que participan en los encierros y sueltas de la región. En tales festejos, la normativa autonómica establece la obligatoriedad de sacrificar a los animales. Para ello, finalizada la fiesta, se introduce al animal en un pasillo cada vez más estrecho (manga) hasta que queda inmovilizado en el hueco de sujeción. Allí, sin presencia de público, es apuntillado.La asociación protectora de animales considera que se trata de una práctica dolorosa para la res, ya que ésta permanece consciente durante su sacrificio. Este sufrimiento aumenta en la medida en que, según la citada organización, el reglamento regional no especifica quién ha de acabar con la vida del animal, lo que abre las puertas a la intervención de matarifes aficionados.
Para evitar estas situaciones de dolor innecesario, esta asociación solicitó "humanizar" el tránsito final de las reses, mediante el empleo de instrumentos que los dejen inconscientes durante su sacrificio. Esta apuesta por una muerte eutanásica ha sido bien acogida por Pedroche, quien reconoció que pretende incluirla en el reglamento taurino.
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Operario cualificado
La Comunidad aplicará una "muerte eutanásica" a las reses de los festejos
"El requisito para que esta propuesta sea efectiva es que la persona que lleva a cabo el sacrificio sea un operario cualificado, que sepa usar el instrumental, reparar el material y mantenerlo en perfecto estado", indicó Chillerón. La propuesta de una muerte eutanásica para las reses que participen en sueltas y encierros, pese a contar ya con el apoyo de Pedroche, será perfilada en los próximos meses por un grupo de trabajo en el que participarán tanto los proteccionistas como expertos de la Administración.El cambio legislativo que se hará efectivo el año que viene supondrá, a decir de los proteccionistas, un hito en España, donde ninguna comunidad ha incluido en su normativa la eliminación de la puntilla. "También servirá de norte para la ley estatal que se está elaborando. Sería muy importante que la Comunidad lo aceptase", indicó un portavoz de la asociación. En la región se celebran cerca de 300 encierros al año.
