Un incendio obliga a evacuar a 350 presos de Valdemoro en plena noche.
La cárcel de Valdemoro vivió en la madrugada de ayer una de sus noches más angustiosas. Un incendio desatado en un taller de la prisión dedicado a la fabricación de fibra de vidrio obligó a sacar en plena noche a 350 presos (15 peligrosos) de sus celdas, y a trasladarlos apresuradamente a una zona alejada de las llamas.
La precipitada evacuación de los 350 presos fue llevada, a cabo por una docena de funcionarios, en condiciones que la Agrupación del Cuerpo de Ayudantes de Instituciones Penitenciarias (ACAIP) calificó de extremadamente peligrosas por la falta de luz y de personal.
El fuego, que en su avance devastó el taller, aunque no ocasionó heridos, se originó supuestamente por la combustión de los gases liberados por un bidón de resina. Ante la imposibilidad de sofocar las llamas por sus propios medios, la prisión requirió la presencia de los bomberos de la Comunidad, que emplearon tres horas en extinguirlas. El citado sindicato ya criticó en 1996 la situación del taller y solicitó medidas preventivas.
Resina inflamable
Doce funcionarios escoltaron a los presos con linternas por falta de luz
El resultado del incendio fue la destrucción del taller de fibra de vidrio y daños en los otros cuatro ocasionados por el humo y el hollín.A la espera de los informes técnicos, la Dirección General de Instituciones Penitenciarias descartó en principio que el incendio hubiese sido provocado por algún preso.
"Los presos entran en sus celdas sobre las nueve y media de la noche, por lo que en el momento del siniestro no había nadie en el taller. Además, los primeros datos apuntan al fallo de una resistencia. Se ha tratado de un incendio como el que hubiese podido ocurrir en cualquier fábrica", indicó una portavoz de Instituciones Penitenciarias. El sindicato de prisiones tampoco dio crédito a la posibilidad de que hubiese sido un incendio intencionado.
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