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El acusado del 'crimen de Arganzuela' se defiende

Husein Alí Daoud, de 18 años, alias Shian, acusado de matar a otro joven en el ferial de Arganzuela el pasado día 15, ha rebatido desde la cárcel de Vigo la versión policial sobre su implicación y su arresto.Según ha contado a su padre, Alí Daoud, un comerciante iraquí como él mismo, él estaba inconsciente en el suelo mientras David Afonso Correira, de 17 años, era herido de muerte durante una reyerta tumultuosa en las atracciones instaladas en Arganzuela con motivo de las fiestas de San Isidro.

Según su versión, la pelea se originó porque a él se le cayó una moneda de 500 pesetas (y no a una chica amiga del fallecido). Al reclamársela, empezó la disputa y una primera parte de la pelea que a él le dejó en el suelo y sin sentido tras recibir un estacazo. A Husein, según dice, le reanimó un tal Paco, fontanero, cuando la pelea se extinguía, para que huyera "porque había un chico muerto".

Otros detalles de su relato contradicen o se suman a la versión policial: el chaval se presentó en comisaría en Vigo cuando los agentes telefonearon a la tienda que él regenta en Madrid. Y el chándal que encontraron en su casa de Vigo no tiene mancha alguna de sangre, según su versión.

PASA A LA PÁGINA 5

Un destornillador

El padre del detenido lamenta las "malas compañías" de Husein

El detonante, según él, fue una moneda de 500 pesetas que se le cayó al suelo y recogió una chica de otra pandilla. Al reclamársela, empezó la disputa y una primera parte de la pelea que a él le dejó sin sentido tras recibir un estacazo. La intervención de otra pandilla desencadenó una segunda fase en la gresca. Husein seguía inconsciente.El acusado viajará mañana a Madrid. La policía le ha intervenido un chándal que puede conservar sangre de la víctima mortal de la pelea. Su familia desmiente que este chándal, sin lavar, tuviera ninguna mancha de nada. Además, el joven iraquí señala que él nunca estuvo armado, y lo único que le consta es que uno de sus compañeros, el marroquí Mounir A. V., de 21 años, que resultó herido y que está también detenido, llevaba consigo un destornillador. Después dijo que había pinchado a alguien en una pierna. "Estos días mi hijo ha estado tranquilo y ha dormido muy feliz. Nadie que haya matado podría actuar así", concluye su padre desde la ciudad de Vigo.

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