El bombardeo musulmán de un polvorín croata amenaza con provocar una catástrofe en Bosnia
Dos proyectiles lanzados por las fuerzas musulmanas alcanzaron ayer de lleno una fábrica de armas croata en la ciudad de Vitez, en Bosnia central. Portavoces croatas advirtieron del serio peligro existente en la zona e indicaron que la ofensiva militar deencadenada por las fuerzas bosnias podría causar "una explosión terrorifíca, y una catástrofe sin precedentes en una amplia franja en Bosnia-Herzegovina". Es la primera vez que la factoría militar, de gran importancia estratégica por su tamaño y localización, resulta directamente alcanzada en un bombardeo.
El ataque se produjo dentro de una ofensiva a gran escala de la Armija (Ejército bosnio de mayoría musulmana) con el objetivo de conquistar Vitez. Tras la captura de Vares, a 40 kilómetros de Vitez, el jueves pasado, las fuerzas leales al Gobierno de Sarajevo intentan recuperar por la fuerza, los territorios que se les niegan en la mesa de negociaciones.Fuentes de los cascos azules desplegados en la zona señalaron que los combatientes del Consejo de Defensa Croata (HVO) se están empleando a fondo en la defensa de Vitez y de la fábrica de municiones, vital para mantener activa la maquinaria de guerra croata. Una eventual toma de la factoría militar por las fuerzas musulmanas desarbolaría las defensas de Vitez e impediría el aterrizaje de los helicópteros croatas que distribuyen la munición entre sus combatientes en Bosnia central.
Volar la factoría
Los defensores croatas amenazaron con volar la factoría, una de las de mayor importancia de la antigua Yugoslavia, para evitar su caída en poder de las tropas musulmanas.
Veso Vegar, portavoz del HVO, reconoció que los combatientes de la Armija capturaron algunos puntos estratégicos, pero añadió: "La mayoría de ellos han sido recuperados por el HVO por lo que no se puede hablar de cambios significativos en las líneas del frente alrededor de Vitez". El dirigente del HVO estimó en unos 10.000 los refugiados croatas que han llegado a la localidad de Kiseljak desde la caótica caída de Vares, de donde más de 15.000 civiles se vieron obligados a huir.
Los primeros civiles serbios de un contingente de 1.500 personas de nacionalidad croata, musulmana y serbia que debían ser evacuadas el sábado pasado de Sarajevo, empezaron ayer a salir de la capital bosnia escoltados por fuerzas de la ONU. Cerca de 300 mujeres, ancianos y niños abandonaron la ciudad a bordo de dos autobuses en dirección al territorio controlado por las milicias serbias, primera etapa de su viaje a Belgrado. Los otros evacuados, croatas y musulmanes, viajarán a Split y Dubrovnik, en la costa adriática.
Uno de los autocares que transportaba a civiles serbios fue tiroteado cerca de la localidad de Kula, en territorio controlado por la Armija, donde un primer grupo de 40 personas se disponía a descender del vehículo. Las Fuerzas de Protección de la ONU (Unprofor) encargadas de la escolta del convoy solicitaron refuerzos para continuar el trayecto.
La evacuación de 1.500 civiles de Sarajevo fue interrumpida por el operativo militar de la Armija (Ejército bosnio de mayoría musulmana) en la capital bosnia para desmantelar la milicia croata del HVO decretada por el Gobierno del presidente Alia Izetbegovic.
El traslado del nuevo contingente de refugiados coincidió con la visita a Sarajevo del mediador internacional Thorvald Stoltenberg, quien se entrevistó con Izetbegovic. Ha sido el primer contacto del negociador con el Gobierno bosnio en más de un mes, según declaró el primer ministro, Haris Silajdzic, que ha acusado a Stoltenberg y al otro mediador, David Owen, de abandonar el proceso de paz para Bosnia-Herzegovina.
Militares detenidos
Por otra parte, los croatas acusaron ayer al Gobierno de Izetbegovic de practicar la limpieza étnica y el terrorismo contra los croatas tras el arresto de cuatro altos oficiales de esta etnia que participaban en la defensa de Sarajevo.
Según la agencia de noticias croata, un militar musulmán, Nedeljko Zaraja, ha ocupado el puesto de máximo jefe de la antigua brigada croata de Sarajevo. Izetbegovic decidió el sábado disolver esta brigada al acusar a los croatas de una campaña contra los musulmanes en Bosnia central.
De otro lado, tres vehículos blindados de las ONU que transportaban tres clérigos croatas fueron interceptados en las afueras de Sarajevo en un control de las milicias serbias, que retuvieron a dos ayudantes de los religiosos.
