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Kohl pide a los sindicatos alemanes que moderen sus demandas

Los sindicatos del sector público de Alemania concedieron ayer un ligero respiro a los ciudadanos de unas cuantas ciudades, aflojando el cerco de la huelga al reanudarse los transportes urbanos, con vistas al largo fin de semana. El canciller Helmut Kohl hizo un llamamiento a los sindicatos indicando que sus excesivas demandas impedirán la creación de empleo. La huelga entró ayer en su cuarto día y los empleados públicos ya han anunciado que el próximo martes paralizarán los aeropuertos.

"No se trata de un respiro" aseguró Willy Hanss, miembro de la dirección de la OTV, refiriéndose a la reapertura del transporte público en las principales ciudades de Baviera, Baden-Würtemberg y el Sarre, "sino de de nuestra manera de decirles a los ciudadanos alemanes que la medida de huelga no es contra ellos, que somos flexibles".

Hanss indicó que ayer para ron 110.000 trabajadores del sector público, contra los 150.000 del miércoles. El líder la la OTV quiso dejar claro que la huelga puede durar mucho más. "Nuestros fondos de huelga están llenos", dijo, "podemos seguir durante mucho tiempo".

En Bonn, Francfort, Colonia y Düsseldorf, y en todas las grandes ciudades de Renania del Norte-Westfalia, siguió el día de ayer el paro de los transportes públicos. Tampoco se ha reanudado el servicio de recogida de basuras y sigue en huelga el personal hospitalario y los empleados de correos.

El aeropuerto

Una portavoz del aeropuerto de Francfort, el de mayor tráfico de la Europa continental, anunció ayer que la huelga en el mismo empezará el martes de la próxima semana. La OTV no quiso confirmar de manera oficial la noticia, pero cabe recordar que el martes indicó que cuando cierre el aeropuerto de Francfort, se paralizarán también los de Múnich, Colonia y Düsseldorf, cerrando completamente de esta forma el tráfico aéreo de Alemania. El Gobierno, sin embargo, no parece dispuesto a ceder a las pretensiones de los huelguistas que piden un aumento salarial de un 9,5%, contra el 4,8% que ofrece la patronal.El canciller Kohl, en su alocución del primero de mayo, recordó a los huelguistas que sus peticiones ponen en peligro la recuperación económica de la ex RDA, donde no afecta la huelga convocada en los distintos servicios públicos de la antigua Alemania Occidental. La oferta de Kohl forma parte de la política de austeridad impuesta para pagar el coste de la unificación. El canciller explicó que su llamamiento no significa que esté pidiendo sacrificios a los trabajadores, sino que no aumenten más su riqueza.

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