Otros cinco cubanos entran en la Embajada española en la Habana
La crisis en las relaciones entre España y Cuba alcanzó ayer un nivel de consecuencias impredecibles después de que otros cinco ciudadanos cubanos penetrasen, pese a la gran vigilancia existente, en la Embajada de España en La Habana en busca de protección, con lo que ya son nueve los refugiados en la misma representación diplomática.Viene de la primera página
La situación provocada por este nuevo incidente, en medio de una verdadera guerra diplomática entre España y Cuba, adquiere ya visos de desbordamiento y empieza a recordar los sucesos ocurridos hace 10 años en la Embajada de Perú, que concluyó con la salida masiva de ciudadanos cubanos conocida como la crisis del Mariel.Dos de los nuevos refugiados son hombres jóvenes que alrededor del mediodía saltaron la valla que da a un pequeño descampado junto a la embajada y, desde allí, al recinto diplomático exterior, lo que resulta inexplicable puesto que cada metro de esa zona se encontraba vigilado en la mañana de ayer por policías cubanos en el exterior y españoles en el interior.
Aprovechando la confusión y el movimiento de policías hacia ese lugar, otras cinco personas intentaron entrar por la puerta principal. Tres de ellas, un matrimonio con una hija de corta edad, lo consiguieron, pero las otras dos fueron detenidas mientras lo intentaban. El matrimonio, que permaneció tres horas en el vestíbulo de la embajada, comentó a este enviado que piden refugio porque sienten miedo.
Los dos jóvenes que penetraron por el jardín no habían recibido anoche autorización para entrar en el edificio de la embajada. Todos los nuevos refugiados piden ayuda para salir del país, aunque los funcionarios españoles no han podido precisar todavía sus propósitos exactos ni sus antecedentes políticos.La Embajada de España, cuyo titular, Antonio Serrano de Haro, viajará el lunes a Madrid llamado por el Gobierno, pretende pedir protección especial para las residencias de sus diplomáticos.Pasa a la página 3
Acelerado deterioro de la crisis España-Cuba
Como consecuencia de la grave crisis surgida en las relaciones entre España y Cuba, fuentes diplomáticas habían advertido en días pasados del peligro de que la situación en la Embajada española evolucionase de forma similar a la de Checoslovaquia, cuyo encargado de negocios denunció la entrada de provocadores a las órdenes del Gobierno cubano.Desde la llegada el jueves de los cuatro miembros del Grupo Especial de Operaciones (GEO), la vigilancia en la sede diplomática española se había elevado hasta límites que hacían impensable más casos de refugiados, a los que, de momento, las autoridades españolas denominan "acogidos". Lo más sorprendente es que dos jóvenes, de aspecto fuerte, según testigos, consiguiesen penetrar en el patio de la Embajada sin ser detenidos por los policías que montan allí guardia a lo largo de toda la calle. El matrimonio que logró el acceso al vestíbulo situado junto a la puerta de salida dijo a EL PAÍS: "Uno aquí está perseguido desde de Cuba".La Embajada cerró ayer sus puertas totalmente después del incidente, y lo más probable es que la próxima semana siga cerrada sin atender las labores consulares. La policía cubana ha reforzado aún más la vigilancia con la colocación de una cuerda alrededor del edificio y una barrera con tablones de madera.
La entrada de nuevos refugiados en la Embajada de España, que se produjo mientras el embajador se encontraba reunido con el viceministro de Relaciones Exteriores, José Raúl Viera, ha creado una gran alarma en los ambientes diplomáticos en esta capital al producirse, además, el mismo día que el diario Granma, órgano oficial del Partido Comunista de Cuba (PCC), publicaba, 3, toda página y en un tono alto, la primera información sobre esta crisis.
"No os preocupéis, cabo Ordóñez, vuestro biznieto será un gran diplomático". La frase, dirigida por un irascible y bigotudo oficial del ejército colonial español del siglo pasado a un subordinado con aspecto de idiota, con e1 trasfondo de un valeroso mambí (patriotas cubanos que lucharon en la guerra de independencia contra España), forma parte de un chiste que el diario Granma incluye en la página tres de su edición de ayer.En esa misma página, el Gobierno cubano publica por primera vez al pueblo cubano la nota difundida el miércoles pasado contra el ministro español de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, y toda la información sobre la crisis de las relaciones entre el régimen de Fidel Castro y España, con lo que, según la interpretación del embajador español en La Habana, Antonio Serrano de Haro, "se da un nuevo paso por parte de Cuba en el conflicto abierto".La televisión cubana interrumpió su programación poco después de las ocho de la mañana de ayer para anunciar el contenido de lo publicado por Granma y para leer en varias ocasiones el conocido comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores cubano. Hasta ahora, los medios de comunicación cubanos habían ignorado la crisis con España -obviamente, en un intento de restar importancia al asunto- y se habían limitado a tratar los sucesos ocurridos en la Embajada de Checoslovaquia.
Primera reacción
La publicación en el rotativo comunista de la nota contra Fernández Ordóñez aporta a ésta el máximo carácter oficial y supone una primera reacción cubana a la decisión española de suspender su cooperación económica con Cuba, aunque fuentes diplomáticas en este país opinan que no será la última.
Fuentes cubanas han advertido que los más altos dirigentes de Cuba están afectados en lo más profundo por la última decisión adoptada por el Gobierno español e interpretan la medida como una agresión del más alto calibre.
El propio embajador español, que hoy tenía previsto llegar a Madrid aunque su viaje se ha retrasado hasta el lunes, ha reconocido que la suspensión de la ayuda hace de ésta "una crisis con bastante calado".
La suspensión de la ayuda española tiene más significado político que económico, pero también puede afectar seriamente en ese último campo, dado que existía actualmente en Cuba un ambiente muy favorable a la inversión privada española, sobre todo en el área turística.
El coordinador de la cooperación española en Cuba, Angel San Juan, declaró ayer que, entre otros efectos, se cierra uno de los pocos canales que poseen los técnicos y científicos cubanos de mantenerse en contacto con las tecnologías y avances en el campo de la investigación occidental. España participa actualmente en un importante centro de ingeniería genética en Camagüey y en un instituto de oncología en La Habana.
La suspensión de la ayuda española afecta también a los preparativos del V Centenario del Descubrimiento de América en uno de los países donde más se había avanzado en ese terreno y puede provocar, incluso, que el Gobierno cubano decida la disolución de su comisión nacional.
La última publicación de Granma deja ya en entredicho el comportamiento de los diplomáticos españoles en La Habana y acusa indirectamente al embajador de cierta complacencia con el comportamiento de los refugiados.
Esta situación hace temer una evolución de los acontecimientos similar al caso de la Embajada de Checoslovaquia.
