La dirección de un centro docente de Huesca dimite por la ubicación de una nueva cárcel
Las protestas por la ubicación de la nueva cárcel de Huesca van en aumento. La dirección del Centro de Enseñanzas Integradas (la anterior universidad Laboral) de la capital altoaragonesa ha presentado la dimisión en bloque, en señal de protesta por la construcción de la nueva prisión en la localidad.La ubicación del proyectado centro penitenciario ha sido prevista a tan sólo un kilómetro de distancia de este centro docente. El consejo escolar del Centro de Enseñanzas Integradas ha abordado también esta cuestión y ha acordado posponer hasta el próximo mes de septiembre su decisión respecto al emplazamiento de la futura cárcel.
Estas protestas se suman a la de los padres y alumnos (1.200 externos y 800 internos) y de otros colectivos vecinales de Huesca.
Por otra parte, el alcalde de Huesca, el socialista Enrique Sánchez Carrasco, firmó ayer en Madrid el protocolo de cesión de terrenos a la Dirección General de Instituciones penitenciarias. El Ayuntamiento cede una finca de 17 hectáreas, situada en las afueras de la ciudad, donde se levantará el nuevo centro penitenciario que contará con 350 celdas individuales. A cambio, el Ministerio de Justicia desalojará la actual prisión, ubicada dentro del casco urbano de Huesca y cederá al Ayuntamiento de Huesca las instalaciones de esta vieja prisión.
La ubicación de esta cárcel generó numerosas protestas vecinales en los últimos años.
