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La guerrilla comunista colombiana rechaza el acuerdo de paz logrado entre el Gobierno y el M-19

Las Fuerzas Armadas Revolucionarias Colombianas (FARC, de orientación comunista), el grupo guerrillero más numeroso del país, calificaron de "politiquería" los acuerdos de paz logrados entre el Gobierno y el Movimiento Diecinuevo de Abril (M-19) a mediados del pasado enero y exigieron una vez más que el interlocutor para la reconciliación nacional sea la Coordi nadora Nacional Guerrillera que agrupa a los principales grupos rebeldes del país.La negativa de las FARC a sumarse a una "paz parcelada" como la calificaron, se produjo en el segundo gran encuentro por la paz en Colombia, realizado este fin de semana en Ibagué, capital de la provincia de Tolima, zona en la cual se han llevado a cabo los diálogos M-19-Gobierno.

En Ibagué, políticos, Gobierno y grupos guerrilleros pusieron las cartas sobre la mesa para clarificar sus posiciones.

Las FARC, a través de un mensaje enviado por su comandante Jacobo Arenas, y otros grupos guerrilleros, así como el partido comunista y los conservadores insistieron en acusar al Gobierno de querer parcelar la paz. Para estas críticas hubo una enérgica respuesta oficial: "El Gobierno tiene la obligación de hacer la paz con quien quiera hacerla", afirmó el consejero Rafael Pardo. Y por primera vez dijo algo que para muchos es una realidad: "La Coordinadora Nacional Guerrillera carece de posiciones comunes. ¿Cómo es posible hablar con algo que se llama Coordinadora o más precisamente con quien en la Coordinadora? El Gobierno no es el llamado a unificar la guerrilla".

Al encuentro, realizado en el teatro Tolima, asistieron más de 2.000 personas. Allí se escuchó una vez más la posición del Ejército de Liberación Nacional (ELN), grupo guerrillero dirigido por el cura español Manuel Pérez. Para este movimiento, que se ha especializado en volar oleoductos en las zonas petroleras, el diálogo debe ser para humanizar la guerra, no para terminarla. La propuesta, sin embargo, no fue acogida en el encuentro de Ibagué. "Humanizar la guerra significa que nos tenemos que resignar a continuar en ella", dijeron políticos de diferentes matices.

Pero la gran sorpresa fue la posición de Fernando Jaramillo, presidente de la Unión Patriótica, coalición en la que los comunistas son mayoritarios. Jarami¡lo condenó por igual los operativos militares que se realizan mientras se habla de paz, y los actos de terrorismo del movimiento insurgente. "Unos y otros tienen la visión fija de llevarnos a la guerra", dijo Jaramillo.

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