Hernández Mancha considera un foco de confusión el Programa 2000 del PSOE
Antonio Hernández Mancha, presidente de Alianza Popular, opina que el Programa 2000 del PSOE es un foco de confusión, ambigüedades y problemas. Citó como ejemplo de ello la situación autonómica de Ceuta y Melilla: "Los estatutos de estas dos ciudades me ocasionan estupor y confusión, ya que no hay dos veces que digan la misma cosa", afirmó. Según declaró Hernández Mancha se intenta disfrazar como estatuto de autonomía "lo que es simplemente una carta municipal".El presidente de AP hizo ayer un breve alto en sus vacaciones, de las que disfruta junto a su familia en un hotel de Torremolinos (Málaga), para celebrar una conferencia de prensa en la que intentó dar una imagen de una Alianza Popular sin problemas, en la que no se discute su liderazgo.
Los estatutos de autonomía para Ceuta y Melilla fueron tachados por el presidente aliancista de "meras cartas municipales". "Comprendo que son dos casos peculiares que no requieren un tratamiento de comunidad autónoma", comentó, "pero sí deben tener un marco en el que se llegue a un término medio entre estatuto autonómico y carta municipal".
En lo que se refiere a Ceuta y Melilla, Hernández Mancha añadió que el Programa 2000 sólo ha servido para crear una mayor confusión. "Entre los máximos representantes socialistas sólo encuentro contradicciones según con quien hable". Extendió este confusionismo a todo el ámbito del programa y añadió que es "sólo una campaña de imagen y de propaganda política". "No entiendo cómo se puede estar pensando en resolver los problemas de dentro de veinte años cuando hoy existen muchos y muy graves".
La crisis gallega
Se refirió también el líder aliancista a la crisis abierta en la Xunta de Galicia con el procesamiento de Xosé Luis Barreiro. "Con su dimisión no se resuelve esta crisis, porque no se puede enmascarar como un tema personal unos presuntos delitos de prevaricación y cohecho que sólo se cometen en el ejercicio de un cargo público". Agregó que la crisis desatada sólo se resolverá "democráticamente cuando se le consulte al pueblo gallego sobre quién quiere que le gobierne".Por otra parte, Hernández Mancha restó importancia a los intentos producidos desde su propio partido para apearle de la presidencia de Alianza Popular. "Somos 250.000 militantes y es lógico que haya alguno descontento. Son pocos, pero se les amplía la voz y deforman la realidad".
Responsabilizó de esta campaña a algunos dirigentes que han perdido los congresos provinciales. "Quienes así se comportan parece que trabajan más para el PSOE que para AP". Aseguró Hernández Mancha que seguirá en la presidencia mientras tenga el apoyo mayoritario del partido. "De nada valdrán las opiniones minoritarias", precisó.
