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Los secretarios generales de UGT y CC OO coinciden en reclamar al Gobierno un giro en la política social

El encuentro mantenido ayer por Nicolás Redondo, Antonio Gutiérrez y una amplia representación de las ejecutivas de UGT y CC OO ha servido para que los dos sindicatos fijen un amplio índice de iniciativas conjuntas. El secretario general de Comisiones cree que se ha logrado una unidad de acción no coyuntural, mientras que el máximo responsable de UGT no va tan lejos y habla de identidad en el análisis de los problemas de trabajadores y parados y de "plataformas coincidentes". Sí están de acuerdo en que la situación económica permite reclamar al Gobierno "un giro en su política social".

Las cuestiones en las que los dos sindicatos mayoritarios actuarán conjuntamente son: negociación colectiva, cobertura del desempleo, reforma del Inem, resolución de conflictos colectivos, reglamento de los fondos de pensiones y control de la contratación laboral precaria. En la reunión de ayer, rehusaron abordar temas en los que las diferencias son grandes como, por ejemplo, la configuración del Consejo Económico y Social. En el análisis y en las soluciones a los problemas, los dirigentes sindicales lograron un grado de acuerdo desconocido en los últimos años. Se trata de la primera reunión que Redondo mantiene con Gutiérrez desde que éste es secretario general de Comisiones y la primera, en dos años, que los sindicatos celebran con la presencia de sus máximos dirigentes.Comisiones aceptó sumarse a la iniciativa ugetista de reclamar al Gobierno la apertura de negociaciones sobre empresa pública, definir el papel del sector y fijar en él un nuevo marco de relaciones laborales, cuestiones que, como es sabido, planteaba Redondo en una carta enviada a Felipe González el pasado 14 de enero y que aún no ha tenido respuesta.

También apoyará CC OO la petición a CEOE de iniciar una concertación estructural en la que se discuta la aplicación de las nuevas tecnologías, productividad, participación sindical, formación profesional y arbitraje para la resolución de conflictos individuales y colectivos. Sobre este último punto, una comisión conjunta elaborará el borrador que se presentará a la organización empresarial.

Redondo y Gutiérrez explicaron que, durante el encuentro, de casi tres horas de duración, habían analizado los logros económicos y la mejora de algunos indicadores, como inflación e incremento de las inversiones, pero constataron que la política de ajuste ha servido para crear más paro, aumentar la precariedad en el empleo, reducir la cobertura a los parados, recortar las prestaciones sociales, distribuir desigualmente la renta y coinciden en que las inversiones extranjeras son especulativas y no están sirviendo para crear empleo. Lo racional, según Redondo, es que ahora el Gobierno dé el giro social pertinente para conseguir una mayor justicia social.

Plataformas coincidentes

En la negociación colectiva, los dos sindicatos van a reivindicar un incremento salarial del 6% y harán hincapié en negociar claúsulas de revisión, dado que creen no se va a conseguir la previsión de inflación del 3%. En productividad, reclamarán la participación de los trabajadores y que se oriente a inversiones generadoras de empleo.

Redondo matizó que se van a defender "plataformas coincidentes pero no conjuntas" y adelantó que no van a permitir que se impongan topes salariales, tal y como ha recomendado el ministro de Economía a los empresarios. Agustín Moreno, responsable de acción sindical de CC OO, cree que esa batalla se está ganando, dado que en los convenios negociados este año, que afectan a 13.000 trabajadores, se ha pactado un incremento medio del 8,4%.

Tanto Comisiones como UGT están dispuestos, a controlar la contratación laboral precaria, reducir la jornada y avanzar en el reparto de trabajo para paliar el paro. Ayer se aportó el siguiente dato: de los 7,5 millones de asalariados españoles, 1,5 millones están contratados temporalmente.

Los dos sindicatos emplazan, además, al Gobierno a que reconozca el derecho a la negociación colectiva de los funcionarios, piden la apertura de negociaciones sobre la reforma del Instituto Nacional de Empleo y que, en cobertura del desempleo, cumpla el compromiso fijado en el Acuerdo Económico y Social, de forma que el subsidio alcance al 48% de los parados.

El grado de coincidencia alcanzado es, para el secretario general de la central socialista, lógico y "no significa que UGT se haya radicalizado, ni que CC OO se haya moderado. Eso forma parte de una campaña que, como todo el mundo sabe, alguien ha lanzado contra UGT", según palabras textuales de Redondo.

Antonio Gutiérrez cree que la reunión ha sido muy positiva y ha servido para avanzar en "la unidad de acción, no coyuntural, y con una sólida base".

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