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Marín califica de decisiva la reunión del día 17 con la CEE

Andrés Ortega

La sesión de negociación del 17 al 20 de marzo con la Comunidad Económica Europea (CEE) "es el último tren que nos queda para llegar a la estación del 29 y del 30", fecha del Consejo Europeo de Jefes de Estado y de Gobierno de la CEE, declaró ayer en Bruselas Manuel Marín, secretario de Estado para las Relaciones con la CEE. Marín reveló que además del viaje de hoy a París, el presidente del Gobierno, Felipe González, tiene proyectos de visitar próximamente otras capitales europeas "en función de las circunstancias". Marín repitió que a la vista de lo que haya ocurrido el día 20 "habrá que sacar las conclusiones".Marín se entrevistó con la presidencia italiana del Consejo de Ministros de la CEE (el embajador Piero Calamia) y con la Comisión Europea (su vicepresidente, Lorenzo Natali). "Me gustaría dar buenas noticias, pero no hay ninguna novedad", declaró Marín.

Ayer fue sólo un "intercambio de información y sondeo", pues Calamia no tenía ninguna postura comunitaria que presentar a España. La próxima semana habrá nuevos contactos técnicos.

"Todo induce a pensar", dijo Marín, que para el 17 "tanto a la CEE como a España les espera una sesión que se presenta bastante difícil". Pero para Marín en el interior de algunos de los capítulos en negociación "hay cosas que son más asequibles", sin precisar más "para no crear falsas expectativas ni movimientos de insolidaridad, que ya se están dando en España" por parte de sectores que piensan que el acuerdo está al alcance de la mano. Pero las posiciones "siguen estando muy separadas". Francia parece, segun Marín, haber flexibilizado algo su postura y "hasta mucho" en el tema de Canarias, que "puede salir bien sin echar las campanas al vuelo".

El último cuarto de hora

El caso es que en la vida de la CEE es sumamente raro que los ministros tomen decisiones importantes en vísperas de una cumbre. Es más, algunos medios comunitarios sospechan que España quiere forzar hasta el límite la negociación con la CEE entre el 17 y el 20 y luego, para el acuerdo, espera que la cumbre mejore la oferta.

Siempre se ha hablado del "último cuarto de hora", y nadie ha puesto aún todas sus cartas sobre la mesa. Si la posición comunitaria es de dureza, la española también. "Lo que pasa entre nosotros me parece normal, y lo que pasa en la CEE, su forma de tratarnos, crea una reacción en España. La gente no entiende lo que pasa". La palabra por parte española, según opiniones tanto españolas como comunitarias, la tiene ahora el Gobierno español, y más especialmente el titular de Agricultura, Carlos Romero, que hasta ahora no ha soltado las riendas del Caballo de las concesiones finales en los dos capítulos principales que quedan: pesca y agricultura. En pesca, comentó Marín, "hablar de período transitorio es una pura ficción óptica; lo que importa no es cómo se vista al muerto, sino las cuotas de pescado y el número de barcos". Pero aún no se ha entrado realmente en la negociación de las cifras, la principal.

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