Conmoción en Sicilia tras el suicidio de un líder de la DC
El suicidio, el sábado, del magistrado y ex secretario regional de la Democracia Cristiana siciliana Rosario Nicoletti, de 53 años, ha causado profunda conmoción en en la isla. Tras haber intentado primero dispararse en vano con su pistola, intentona frustrada por su esposa, Giovanna Ballati, Nicoletti se arrojó del octavo piso de su casa, en el centro de Palermo. Según subrayan los observadores, se trata de una tragedia sintomática de la guerra de nervios que está viviendo Sicilia.Nicoletti ha caído víctima de sus escrúpulos y de un sistema nervioso demasiado frágil. Era uno de los mejores hombres de la Democracia Cristiana siciliana. Había sido durante ocho años secretario regional, nombrado por aclamación la primera vez en marzo de 1972.
Pertenecía a la izquierda democristiana. Había elaborado con Piersanti Mattarella, presidente regional asesinado por la Mafia, el primer acuerdo con los comunistas en Sicilia; había organizado el año pasado el primer congreso siciliano contra la Mafia.
Cuando la Democracia Cristiana le propuso últimamente como candidato para presidente regional, todos los partidos habían apoyado su candidatura. Pero su sorpresa fue que, en el secreto de la urna, 20 francotiradores votaron increíblemente contra él. Esto le amargó profundamente y, unido a otras tribulaciones derivadas de su modo de comprender la política, le condujeron al suicidio.
