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El "grapo" Crespo Galende, trasladado urgentemente a la Paz

El miembro de los GRAPO Juan José Crespo Galende, en estado de suma gravedad a raíz de una huelga de hambre de ochenta días, fue trasladado urgentemente anoche al centro sanitario de La Paz, de Madrid, donde ha quedado internado bajo vigilancia de la unidad de cuidados intensivos, según informó a última hora a EL PAIS una alta fuente de la Dirección General de Instituciones Penitenciarias.Según la misma fuente, el estado del citado recluso se ha agravado en las últimas horas, por lo que se ha tomado esta decisión. En el día de ayer se le autorizó a su esposa, Asunción Alonso Arce, a visitar al enfermo, que se encontraba, antes de su traslado a La Paz, en el Hospital Penitenciario de Carabanchel. Crespo Galende decidió el pasado., sábado no ingerir líquido

Gerardo Martín Morales, uno de los abogados de Crespo Galende, manifestó anoche a este periódico que su defendido se encuentra «en estado de coma y pálido», y que su mujer, al visitar ayer la prisión, se negó a que fuera trasladado a La Paz, dado que «respetaba su voluntad».

Tanto Crespo Galende como otros seis miembros de los GRAPO y del PC(r) en huelga de hambre han rechazado la oferta del director general de Instituciones Penitenciarias; de una mejora sustancial de las condiciones de vida en la cárcel de Herrera de la Mancha, por considerar que tales promesas no van acompanadas de las garantías por ellos exigidas para de poner su actitud , informa desde Bilbao Patxo Unlueta. Esta información fue facilitada en conferencia de Prensa convocada por familiares y abogados.

Las mejoras prometidas consisten esencialmente en reducir el tiempo que los presos deben permanecer aislados en sus celdas -que es actualmente de veintitrés horas diarias- a la noche y a dos horas más después de comer. El resto de la jornada, los presos podrán elegir entre estar en el patio o permanecer en el salón de la televisión. Tal oferta, transmitida por el director general de Instituciones Penitenciarias, Enrique Galavis, con quien se entrevistaron el pasado día 2 los abogados de los detenidos, fue en principio rechazada por los miembros de los GRAPO internados en Carabanchel y Zampra, alegando que, «mientras esas, promesas no se plasmen en un documento ni se expresen en una mejora inmediata de las condiciones de los que siguen encarcelados en Herrera, carecen de credibilidad».

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