_
_
_
_
_
Ante el II Congreso de UCD

Se intentará la sustitución de Miguel Herrero como portavoz parlamentario

Las tesis liberales sobre el divorcio son las de Fernández Ordóñez, declaraba ayer Eduardo Merigó, uno de los líderes de ese ala centrista, alineado con el llamado sector crítico. En esos medios liberales era patente la preocupación por la torna de postura del episcopado y se consideraba necesaria una respuesta contundente. Por otra parte, parece que en el congreso se intentará la sustitución de Miguel Herrero como portavoz parlamentario.Para Merigó, los liberales tienen el deber de evitar el confusionismo con la docilidad que ante los obispos puedan mostrar sus compañeros de viaje «crítico» democristianos. El antiguo subsecretario del desaparecido Joaquín Garrigues estima perjudicial esta nueva presión eclesiástica, que tendrá, en su opinión, un impacto externo negativo para el progreso de la causa de los «críticos».

Más información
27 "críticos" piden seguridad política
Libertad de expresión
Ser liberal
El secretario de la UCD andaluza, excluido de la ponencia de estatutos
Las incoherencias ideológicas de origen, clave de las actuales tensiones internas de los centristas
Un equipo de psicólogos estudia el sistema electoral

Los liberales del hotel Palace insisten en que su planteamiento blásico es la autentificación del partido, que debe ser algo más que las emanaciones de Suárez y sus validos. Para ellos, la diferencia fundamental en UCD no es entre los que profesan distintas ideologías -liberales, democristianos, socialdemócratas-, sino entre los que profesan alguna y los que no están adheridos a ninguna.

El intento crítico, según estos interlocutores, es una segunda edición de lo que se pretendió en el primer congreso de UCD, que no salió adelante porque Fernández Ordóñez, como ahora, se fue con Suárez. Los liberales-críticos han ensayado también la fórmula de propiciar una tercera lista laico-progresista para la que han buscado, sin éxito, la cooperación de Ordóñez y de Punset, ministro para las Comunidades Europeas, que rechazó una reunión previamente aceptada en Barcelona.

Otro liberal del mismo cuño y también subsecretario en su día de Joaquín Garrigues en Obras Públicas, Pedro López Jiménez, aseguraba que la corriente crítica no es cosa de resentidos ni de descolocados, como se intenta hacer creer a la opinión pública.

Para López Jiménez, it is nothing personal, only business, pero está fuera de discusión la necesidad de sustituir al presidente, cuya capacidad de encaje y adaptación empieza a crear disgusto en las filas críticas, cara al congreso.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Otros sectores liberales no alistados en la oficina del Palace señalan la Importancia objetiva de hombres como Francisco Zaragoza o Enrique Monsonís, no alineados con los críticos, donde también es inútil buscar a los liberales de sitios tan significativos como Murcia, Asturias, Granada o Alicante, por ejemplo.

Se señala que las relaciones de los liberales, firmantes o no del manifiesto, son buenas, pero los que han quedado fuera subrayan «el tono democristiano que ha tomado la operación tras la entrada en liza de Landelino Lavilla y el apoyo de todos los efectivos Opus a la misma».

Disminuyen las posibilidades de Landelino Lavilla

Observadores liberales no comprometidos estiman, en coincidencia con sectores socialdemócratas, que la beligerancia de Landelino Lavilla le va a privar de la gran oportunidad de erigirse en árbitro de la situación. Sus probabilidades de consolidarse como sucesot de Suárez parecen, desde esta perspectiva, haber disminuido notablemente.El congreso de Palma, según todos los pronósticos, dejará las espadas en alto. La batalla de los críticos continuará después mediante la representación que pudieran obtener en el comité ejecutivo y, sobre todo, en el consejo político, al que esperan aportar efectivos numéricos muy destacados y en cuyo seno los nuevos estatutos van a depositar atribuciones de censurar al presidente del partido.

En las filas del antiguo Partído Popular, uno de los componentes históricos de la primitiva UCD, se comentaba ayer con preocupación las actuales tensiones interiores del partido.

Un ministro de esta procedencia señalaba que el electorado centrista es otra cosa distinta del fervoroso auditorio de dos mil personas concentradas en el Eurobuliding para escuchar a Miguel Herrero de Miñón, donde estaba mejor representada la mejor clientela de Manuel Fraga.

Aceptado que Suárez se impondrá en el round de Mallorca, uno de sus problemas inmediatos será el que plantea la presencia al frente del grupo parlamentario de Miguel Herrero.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_