Lo que soporta un niño
Acabo de leer en el periódico de su digna dirección, correspondiente al día 27 de abril, la carta que les ha dirigido Fernando Gálvez, de Rosas -Gerona-, relacionada con la huelga de los maestros y, en réplica a la misma, mucho agradeceré de su atención publiquen estas líneas, por lo que le quedaré muy reconocido.Dice el señor Gálvez que el niño cuenta con demasiado tiempo libre para hacer el vago, el golfo, etcétera». Permítame, señor Gálvez, que discrepe rotundamente de su afirmación.
El niño, ese ser tan maravilloso que creo nadie ha llegado aún a valorar en su verdadera dimensión, soporta, desde que inicia su asistencia al «colegio», una carga tan grande de responsabilidad, que apenas es comprensible cómo puede mantenerla.
Los pedagogos han llegado a dudar de la efectividad de los métodos educativos que se utilizan. Prueba de la enorme presión a que se encuentra sometido, es el cada vez mayor número de niños que padecen úlceras gástricas de origen psíquico, en períodos de exámenes
