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Las centrales ultiman sus campañas

Las centrales sindicales, tras los acuerdos de convocatoria de elecciones sindicales entre UGT y CCOO y la aprobación por el Gobierno del decreto-ley que las regula, trabajan febrilmente en la preparación de las primeras elecciones sindicales libres que se celebran en España. Cada una de las siglas, según sus posibilidades financieras y la filosofía que preconizan, han puesto en marcha oficinas electorales, campañas de propaganda y cientos de afiliados dedicados exclusivamente a la captación de los cerca de ocho millones de sufragios que los trabajadores pueden emitir en los próximos días para la renovación de representantes en un millón de empresas.

La Unión General de Trabajadores es la central que mayor dinero dedicará, a nivel estatal, a la campaña electoral, y la Confederación de Sindicatos Unitarios de Trabajadores, quien acudirá con menos dinero a la contienda electoral. La UGT, que no ha conseguido el crédito de trescientos millones de pesetas, gestionado en Alemania, por falta de aval del Gobierno español, destinará a la campaña cien millones de pesetas, según declararon a EL PAÍS responsables de su oficina electoral. Comisiones Obreras declara, por su parte, un presupuesto estatal de quince millones de pesetas, cifra bastante exigua para el despliegue propagandístico que tienen preparado. La Unión Sindical Obrera, «que probablemente sea la central que menos dinero destine a la campaña» -según uno de sus dirigentes-, ha presupuestado menos de treinta millones para la propaganda electoral.Los sindicatos unitarios, el SU y la CSUT, van a afrontar la contienda electoral con bastantes menos medios, a juzgar por las declaraciones de sus responsables. La CSUT tiene presupuestados dos millones para la campaña, y el SU se negó a facilitar una cifra aproximada.

ELA-STV no ha querido facilitar a EL PAÍS presupuesto electoral, y ha comentado que toda la organización está trabajando en la campaña.

De la pegatina al "cassette"

En la organización de las elecciones y en la propaganda de cada central queda de manifiesto, además de lo exiguo de las cifras presupuestadas que han declarado en relación con el despliegue de medios, los diferentes recursos económicos de las mismas.La UGT ha montado una confortable oficina central, en la madrileña calle de García de Paredes, con télex y numerosos teléfonos. Al frente de la misma se encuentra Isaías, Herrero -miembro de la ejecutiva-, y en ella trabajan unas doce personas. La campaña de UGT tiene un carácter «formativo», según declararon a EL PAÍS, y para ello han editado ya cinco folletos sobre elecciones sindicales, sistemas electorales, la crisis económica y un estudio jurídico sobre la normativa electoral aprobada por el Gobierno. La campaña se completa con insignias, pegatinas, llaveras, mecheros, carteles y una cassette titulada «La voz de nuestras manos».

Comisiones Obreras, en un piso viejo cercano a la glorieta de lglesia, ha montado también su oficina electoral con télex, fotocopiadoras, varias líneas telefónicas y un equipo de unas veinte personas bajo la dirección de Adolfo Pastor. La campaña está montada a base de carteles, octavillas, folletos explicativos, trípticos y programas dirigidos a problemas sectoriales.

La Unión Sindical Obrera, CSUT y SU, con menos presupuesto y distinta filosofía, han enfocado su campaña fundamentalmente al seno de las empresas y fábricas, «ya que esto no son elecciones legislativas, sino sindicales y no se celebran en un solo día». Los carteles, las octavillas y pegatinas, son también las armas propagandísticas de estas centrales. Los mítines, previstos por todas las centrales, se circunscribirán fundamentalmente, en los unitarios, al seno de las empresas.

ELA-STV, además de carteles y octavillas, tiene preparados comités de propaganda en todas las empresas de más de 250 trabajadores.

Ofertas y lemas

La UGT insistirá en su carácter de central socialista y en la fraternidad que supone la imagen -en su propaganda- de dos manos que se estrechan. Comisiones Obreras, por su parte, hará hincapié en que el triunfo de sus siglas ahora significa la consecución próxima de la unidad sindical. Unión Sindical Obrera plantea su campaña en términos de autonomía socialista e independencia de partidos políticos y grupos de presión: «Trabajador, la USO sólo pacta contigo» es el slogan que con alusión al pacto de la Moncloa va a centrar la campaña de esta central.«La CSUT, el sindicato que habla claro, da soluciones a los problemas y jamás se vende» va a ser la frase de batalla de esta central, que buscará votos en la defensa de su alternativa a la crisis económica frente al pacto de la Moncloa. «Un frente común por el pan, el trabajo y la libertad» es el lema electoral del SU. ELA-STV, que divide su campaña en dos etapas, una a nivel de calle y otra interna en las empresas, expresa su carácter vasco en la propaganda bilingüe lanzada en torno a los lemas «Vota ELA» y «ELA, tu alternativa».

Los problemas regionales, de sector y de empresa también van a ser utilizadas por todas las centrales en sus campañas. Las menos fuertes económicamente tienen a sus ejecutivas y secretarios generales personalmente al frente de las campañas electorales, y el tema es de prioritaria dedicación para todos sus afiliados. No gozan, como las grandes, de sedes especiales para sus oficinas electorales, que funcionan en los locales de las ejecutivas.

Fechas de convocatorias

En cuanto a fechas, tras el acuerdo CCOO y UGT, que abarca ya a dieciocho provincias, las demás centrales, sin aprobar éstas por estimarlas unilateralmente adoptadas, van a tener que aceptarlas en la mayoría de los casos y sólo en aquellas empresas donde cuentan con un control mayoritario de las asambleas podrán escapar a las fechas decretadas por las dos grandes. De hecho, y en base a su aceptación a las decisiones de la mayoría en el seno de las empresas, ya hay puntos donde se han adherido a los días de elecciones fijados por UGT y CCOO. El acuerdo entre estas dos últimas centrales ha llegado incluso -es el caso de Sevilla- a montar una oficina electoral conjunta.En los próximos días, probablemente antes de que finalice esta semana, Comisiones Obreras y UGT llegarán a acuerdos, en las provincias en que todavía no lo han hecho, sobre fechas de celebración de elecciones sindicales.

Con anterioridad a estas elecciones, en los últimos meses se han venido celebrando en algunas empresas, por necesidad de negociar un convenio o por problemas laborales, elección de representantes. Según datos de CCOO, medio millón de trabajadores habían elegido ya, antes de finalizar 1977, sus representantes, pero en muchos casos estas elecciones volverán a celebrarse de acuerdo con la reciente normativa aprobada por el Gobierno.

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