Suárez, decidido a la "disolución" de los partidos que integran UCD
La sombra de Suárez no ha dejado de planear ni un instante sobre la reunión que el comité ejecutivo del Partido Demócrata Cristiano, que dirige Fernando Alvarez de Miranda, ha venido celebrando desde el pasado 28 en su sede social y que finalizó a últimas horas de la noche de ayer. El presidente del Gobierno ha dejado en claro en los últimos días su decidida voluntad de que los partidos que se integraron en la coalición electoral Unión de Centro Democrático se disuelvan como tales partidos y den paso sin ninguna reserva al nacimiento del nuevo partido unitario UCD.La decisión presidencial incide muy fundamentalmente sobre el Partido Demócrata Cristiano, quizá el de mayor coherencia ideológica y de mayor peso político de los que integran actualmente la Unión de Centro Democrático. La actitud que en este tema adopte el citado partido influirá con toda seguridad en las decisiones que tomen a su vez, los restantes grupos que forman UCD. Dentro del Partido Demócrata Cristiano existen fuertes resistencias a la disolución del partido, aun en aquellos sectores que en principio estarían más predispuestos a seguir al presidente Suárez.
A este respecto, la única alternativa que se ofrece a la disolución es el reforzamiento del partido mediante la unión con los grupos que forman la Federación de la Democracia Cristiana, que controla Gil-Robles. Sin embargo, tampoco existe unanimidad en el Partido Demócrata Cristiano respecto a esta alternativa.
Otro de los problemas que tiene planteado el Partido Demócrata Cristiano es la ampliación del documento ideológico de UCD con algunas de las posiciones mantenidas por los obispos en el documento publicado recientemente sobre la Constitución. A este respecto, el comité ejecutivo del PDC se habría mostrado favorable a que el documento de UCD recogiese con más precisión los puntos relativos al aborto y a la libertad de enseñanza, según la doctrina establecida por los obispos españoles.
