La círcular sobre la amnistía todavía no es pública
La circular del fiscal del Tribunal Supremo ha sido enviada ya a todos los fiscales del país, según Cifra y Pyresa. Sin embargo, fuentes consultadas por EL PAIS dan garantías de que el documento aún no ha llegado a ningún tribunal, ni aun al de Orden Público, y añaden que la filtración oficiosa de algunos detalles del mismo para su publicación responden a las presiones que se están produciendo para que salga a la luz pública.
Según informan las citadas agencias, la circular está firmada por el señor Rodríguez Acosta, fiscal del Supremo, y lleva fecha del pasado día 13.Las fuentes de las agencias indicaron que, en gran parte, la circular confiere la responsabilidad de determinar el alcance de la aplicación a los organismos judiciales, y añadieron que los tribunales deben determinar si el elemento subjetivo de la intencionalidad política concurre o no en cada caso. Estos deben ser analizados uno por uno. Además se dice en la circular que «la intencionalidad política no sólo habrá de ser considerada en las infracciones contra la organización del Estado, sus instituciones y magistraturas, sino también en las de carácter político-social». Se hace referencia específica a los delitos comprendidos en este concepto, pero la nota de agencia dice que no se obtuvo autorización para hacer mayores precisiones, aunque añade que se tratan especialmente las figuras delictivas referidas a la tenencia ilícita de armas y depósito de armas, municiones y explosivos.
Se excluyen de la amnistía los delitos que hayan puesto en peligro o lesionado la vida o la integridad fisica de las personas, así como los delitos de terrorismo, en cuanto hayan causado muerte o lesiones o puesto en peligro directo la vida o integridad de las personas.
En cuanto al procedimiento, dice la circular que la aplicación de la amnistía corresponde en cada caso al juez o tribunal que haya conocido la causa. Se precisará la instancia de la parte interesada Cuando no quede pendiente la ejecución de la pena, y se actuará de oficio en caso contrario.
Se cancelarán las responsabilidades civiles frente al Estado y demás entes públicos no ejecutadas. Los antecedentes penales se anularán a todos los efectos.
La circular no ha sido enviada
No obstante, fuentes de abogados defensores, consultadas por EL PAIS, han indicado que ningún fiscal del país, según sus indagaciones, tiene aún la circular, y que ayer, a la hora de cerrar las oficinas del Tribunal de Orden Público, en éstas no se sabía nada del tema. La filtración de parte de la circular es atribuida a las presiones que los letrados vienen haciendo para que sea difundida la misma. A este respecto, un grupo de abogados de distintos colegios de la Península han enviado un escrito al ministro de Justicia protestando por la forma en que el TOP viene aplicando el decreto de amnistía, concretamente en cuanto a la exclusión por este Tribunal de los delitos de tenencia ilícita de armas y explosivos, así como los de terrorismo impropio, es decir, las conductas en que no haya habido riesgos para las personas. También muestra su preocupación por cuanto las causas juzgadas por el decreto de bandidaje y terrorismo serán excluidas en virtud del decreto-ley. Finalmente, expresan su descontento porque las normas de aplicación no han aparecido aún.
Por otra parte, desde el pasado sábado ningún preso político ha sido amnistiado. Se mantiene, por tanto, la cifra de 161 amnistiados, en la que se incluyen rebeldes, objetores de conciencia, etcétera. También continúa estacionaria la huelga de hambre de tres reclusos, dos en el penal de Ocaña y uno en Las Palmas.
Los familiares de presos comunes que mantienen el encierro en la parroquia de Nuestra Señora de la Montaña, en Madrid, han salído con una pésima impresión de su entrevista con el director general de Instituciones Penitenciarias realizada ayer. Este les informó, respecto a las peticiones de los famillares de que cesen los castigos a los reclusos, que la cuestión no es corripetencia suya, sino de las juntas de régimen interior de los centros penitenciarios.
Otra conclusión que se deduce de la entrevista es que no hay esperanzas de alguna gracia para los condenados comunes. En esta situación sus familiares se plantean el seguir adelante en sus gestiones, convencidos de que el diálogo con la Administración no da resultado alguno.
