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Un fuego en dos actos

Los vecinos de Alonso Núñez señalan que fueron dos incendios diferentes. El segundo se propagó al bloque colindante

Varios vecinos en la zona acordonada por la policía
Varios vecinos en la zona acordonada por la policíam. viejo

Los bomberos acudieron a las 23.00 a un fuego en una habitación del tercer piso del número 29 de la calle Alonso Núñez (cerca de las calles de Ofelia Nieto y de Francos Rodríguez). De acuerdo con su versión, era pequeño y tardaron menos de media hora en extinguirlo, ya que ni siquiera afectó a la cama. Le pasaron la cámara térmica a la habitación para ver si había algún foco de calor oculto y no vieron nada, por lo que se marcharon del lugar.

Tres horas más tarde, a las dos de la madrugada, surgió un nuevo fuego en ese mismo edificio, pero en la cubierta (en el tejado) que está sujeto por una gran plancha de madera y se propagó, rápidamente, al inmueble colindante (el número 31 de la misma calle). El tercero es la última altura del edificio, la más próxima a la cubierta.

La pregunta que surge, es ¿pueden estar relacionados? Según fuentes municipales, "eso tendrán que determinarlo los especialistas de la Policía Científica, que estudian si el primer incendio se ha propagado y ha generado el segundo a través de alguna conducción eléctrica o de alguna madera o similar".

Una de las afectadas ha afirmado en declaraciones a la Cadena SER que los bomberos apagaron, en primera instancia, el fuego. A las dos horas, cuando muchos inquilinos del inmueble en el que se originaron las llamas habían vuelto a sus casas y los bomberos ya se había replegado, una vecina gritó "fuego, fuego" y a pedir, desesperadamente, ayuda. Todos los vecinos volvieron a desalojar el edificio ante el intenso humo negro y las llamas, que ya se propagaban al edificio contiguo.

Las llamas arrasan la cubierta entre la humareda.

Ramón, de 55 años, pasaba con el coche de madrugada y vio el incendio. "Había llamas muy altas y cables ardiendo", apunta. Domingo de 58 años y vecino de la calle de Sánchez Preciado afirma que, cuando ya estaba en la cama, empezó a oler "muy fuerte" a humo. El ruido de las explosiones eléctricas fue lo que le despertó.

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Pamela Pimentel, residente en el número 29 de la calle de Alonso Núñez, señala que "si no llega a ser por la vecina del 2ºF", no se habrían dado cuenta. Era una niña que se encontraba viendo la televisión y avisó a sus familiares. Estos, a su vez, dieron la voz de alarma al resto de vecinos.

José Lorenzo tiene 66 años y su hermana reside en el 1ºD del portal número 29. Ella está de vacaciones y él se desplazó al inmueble "para ver qué sucedía". Ahora espera que le dejen acceder "pronto" al domicilio de su hermana. Ella ya ha cancelado sus vacaciones para evaluar los daños que haya podido sufrir la vivienda.

Una de las vecinas que ya ha conseguido acceder a su vivienda.
Una de las vecinas que ya ha conseguido acceder a su vivienda.M. Viejo

Lucía Sánchez, de 69 años, es vecina del 3ºB del número 29 de Alonso Núñez. Fue a su casa a las 23 horas y no pudo acceder hasta pasadas las doce y media de la noche, cuando los bomberos y la policía permitieron acceder al bloque a los vecinos. "Todo el trabajo que he tenido que hacer para conseguir tener mi casa y, al final, me veo en la calle", afirma entre lágrimas.

Los residentes en los edificios número 25, 27, 33 y 35 de Alonso Núñez, todos ellos colindantes a los bloques en afectados por las llamas, ya han podido volver a sus casas en los próximos minutos. Siguen sin suministro eléctrico.

También han retornado a sus viviendas aunque, en este caso, solo para recuperar sus enseres, los vecinos de los bloques de viviendas afectados (29 y 31). Les acompañan efectivos del cuerpo de bomberos y del Samur Social.

Una de las afectadas que ya ha conseguido entrar a su vivienda, un segundo piso del número 31 de Alonso Núñez, sale con las zapatillas empapadas, fruto del agua que cae del techo. Únicamente le ha dado tiempo a coger lo imprescindible y a ver la inundación que sufre su piso. Según le han dicho, "todo estará bien" en un máximo de dos semanas. sin embargo, minutos más tarde se ha frenado el acceso a sus viviendas por temor a que ceda uno de los muros del edificio.

La concejala de distrito de Ciudad Lineal, Elena Sánchez Gallar, que ha acudido al lugar de los hechos en sustitución de la concejala de Tetuán, Paloma García Romero, ha afirmado que el Ayuntamiento garantiza el alojamiento de los afectados, "al menos durante este fin de semana" en en régimen de pensión completa en el hotel Eurobuilding. Sánchez Gallar también ha señalado que tanto García Romero como la alcaldesa, Ana Botella, están "al tanto". Para mañana, se ha convocado una reunión de la junta de distrito en la que se decidirán los siguientes pasos a seguir para minimizar las molestias de los afectados.

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