España golpea una red de pedofilia con 18.000 usuarios en Internet
La policía detiene a 121 personas e imputa a otras 96 por pornografía infantil
Internet conecta cada rincón del mundo. Pero también hace globales los delitos que se propagan en la Red. Es el caso del tráfico de pornografía infantil. En el verano del año pasado, la Brigada de Investigación Tecnológica (BIT) de la Policía Nacional comenzó con la Policía Federal de Brasil una investigación para localizar y dar caza a consumidores de pornografía infantil que les llevó a identificar a 18.000 usuarios de 75 países. En España, la pesquisa cristalizó ayer en la mayor operación contra este tipo de delitos, con 121 personas detenidas y otras 96 imputadas en 15 comunidades autónomas acusadas de descargar y distribuir material pedófilo a través de Internet.
Dos de ellas producían además su propio material y llegaron a fotografiar a sus sobrinos en actitud sexual para distribuirlo. En la Operación Carrusel se han intervenido millones de vídeos y fotografías, algunos con agresiones extremadamente violentas a menores de 13 años y a niños muy pequeños, casi bebés. Con las cifras récord que deja esta operación -que aún sigue abierta-, el número de detenciones en 2008 por pornografía infantil en todas sus modalidades se eleva en España por encima de las 500, según el recuento hecho por Efe (entre 2003 y 2007, la suma fue de 974). Sólo por delitos a través de Internet, la cifra de 2008 va por 359, aseguró un portavoz del Ministerio de Interior.
Esta progresión pone de manifiesto el aumento de la sensibilidad social (muchas investigaciones parten de denuncias de particulares) y el refuerzo y el trabajo de los agentes encargados de combatir estos delitos (la BIT ha recibido el premio internacional Los Niños Primero, concedido por Unicef). Pero la cifra también deja clara la enorme dimensión de esta lacra en un mundo, el de Internet, que no conoce fronteras. De hecho, la colaboración internacional ha sido muy importante en esta operación.
El procedimiento es el siguiente: se localizaron archivos con imágenes pornográficas (en este caso se ha tratado de 130 series de fotos y vídeos) y se siguió su rastro para descubrir a sus consumidores. Así se hallaron 18.000 conexiones en 75 países, de las que 1.600 correspondían a ordenadores españoles.
Éste es el camino que la BIT ha seguido y que ha acabado con 121 detenciones y 96 imputaciones. Todos ellos están repartidos en 15 comunidades autónomas, sobre todo en Cataluña (49 arrestados), Andalucía (37) y Madrid (29). Su forma de operar es una de las más utilizadas por los delincuentes, a través de sistemas P2P, es decir, de intercambio de archivos de ordenador a ordenador. Al menos tres de los documentos intervenidos estaban calificados como preteen hard core (preadolescente de extrema dureza).
La operación culminada ayer también sigue destruyendo el mito de un perfil único para este tipo de delincuentes, o, al menos, el del tópico que señala a un individuo solitario y con problemas de integración. Se hallan entre los arrestados desde pilotos de avión, conserjes y taxistas a un agente del Centro Nacional de Inteligencia (CNI). Entre los imputados (hay constancia de que han descargado pornografía, pero no se les ha encontrado material) también hay un alumno de la academia de la Guardia Civil de Baeza y un policía nacional. Y están representadas todo tipo de edades, desde jubilados hasta dos chavales de 17 años; los expertos advierten de que los infractores cada vez son más jóvenes. Eso sí, la pedofilia es claramente un delito masculino: el 100% de los implicados es varón. Algunos son reincidentes.
El consumo y distribución de pornografía infantil no sólo es un delito, sino que trae aparejado otro peor, su producción. Dos de los detenidos, un hombre de 26 años residente en Santander, y otro de 41, de Badalona, están acusados de producir imágenes pornográficas utilizando a sus propios sobrinos. Ambos hombres, parados, aprovechaban cuando los niños estaban dormidos o se duchaban para hacerles fotografías que luego colgaban en Internet, según fuentes policiales.
"Tras cada imagen y vídeo pornográfico de un niño o niña existe una situación de abuso sexual en la que un menor es vejado. Cada vez que una persona disfruta viendo estas imágenes se está reproduciendo y perpetuando el abuso", advierte la policía. El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, felicitó a los agentes y advirtió de que estos delitos son "objetivos prioritarios" de su departamento.
210 registros
- Todos varones. Los 121 detenidos y 96 imputados en la operación contra la pornografía infantil son hombres.
- De 15 comunidades. Los arrestados e imputados viven en Cataluña (49 de ellos), Andalucía (37), Madrid (29), Comunidad Valenciana (22), País Vasco (15), Castilla y León (13), Galicia (11), Castilla-La Mancha (8), Canarias (7), Murcia (6), Aragón (5), Baleares (5), Cantabria (5), Extremadura (4) y La Rioja (1).
- 800 agentes. La Brigada de Investigación Tecnológica de la Policía Nacional ha coordinado a 800 agentes
y se han realizado 210 registros.
- Millones de vídeos y fotos. La policía ha interceptado millones de vídeos y fotos, en 347 discos duros y en 1.186 CD, entre otros formatos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.