¿La deuda o la fiesta?

Los vecinos de Los Santos de la Humosa también están indignados. Y no es para menos. Puede que este año no se celebren sus fiestas patronales porque el Ayuntamiento está en números rojos. El alcalde de este municipio, situado al este de la Comunidad de Madrid y perteneciente a la comarca de Alcalá, convocó el pasado viernes una asamblea vecinal para dar a conocer la triste realidad.

Si no pagan las facturas a Gas Natural Fenosa, con quien tienen una deuda de 61.000 euros, la compañía interrumpirá en noviembre el suministro de luz en los edificios municipales. Lo mismo sucede con la empresa de recogida de basura (Cespa), que también dejará de prestar sus servicios si no pagan los 80.000 que les deben. Y así hasta llegar a 1.800.000 euros de deuda. Con este panorama, el alcalde manifestó en la asamblea que no van a poder pagar las fiestas patronales, que se celebran a primeros de septiembre, porque no hay dinero. Su teniente de alcalde es más explícito: "Por no tener, no tenemos ni mierda en las tripas".

"Todo el mundo quiere fiestas, pero sin pagar nada", dice la tendera

"No están los ánimos para jaranas", aseguran los jubilados

Algunos vecinos critican la mala gestión de Francisco Javier López, el alcalde saliente: "Es un sinvergüenza con matrícula de honor. Él tiene la culpa de todo", sentencia Luis Cano, de 75 años. En las últimas elecciones el candidato socialista, José Ignacio Fernández, ganó con mayoría absoluta, después de tres legislaturas de gobierno del PP. El mensaje de bienvenida que más escuchó David López, teniente de alcalde, fue: "Felicidades por el cargo, pero nos debe usted dinero".

Ayer la casa del anterior alcalde estaba cerrada y los vecinos aseguraron que se encontraba de vacaciones.

El pueblo, de 2.500 habitantes, está dividido entre los que quieren que las fiestas se celebren a toda costa y los que piensan que es más importante hacer frente a las facturas. En la asamblea, a la que asistieron unos doscientos vecinos, Pedro Enrique Meco, de 56 años, propuso crear una comisión que se encargue de pedir una aportación -"la voluntad"- a los vecinos para sufragar los gastos de las fiestas.

Si la iniciativa sale adelante, el Ayuntamiento se encargará de la gestión. Ya ha fijado un presupuesto de 25.000 euros, "con dos corridas de toros incluidas", añade López. Cada vivienda (unas ochocientas en todo el municipio, según sus cálculos) debería apoquinar entre 40 y 50 euros. Los días festivos se han recortado: de seis han pasado a cuatro. "Es cuestión de poner un poquito de nuestra parte", opina Teodora Sanz, presidenta de la Asociación de Mujeres.

Emilio Saldaña, Gabriel Martínez y Luis Cano se refugiaban ayer en la única sombra que había en la plaza Mayor, en el centro del pueblo. El reloj del Ayuntamiento marcaba las 12.30; el de la Policía Municipal, las 19.00. La razón, nadie la sabe.

Pero cuando sale el tema de las fiestas, estos jubilados lo tienen claro: "No están los ánimos para jaranas". Están dispuestos, sin embargo, a poner dinero para contratar a una auditoría que aclare qué ha pasado con las cuentas del Ayuntamiento. Su amigo Teógenes Aldaña, antiguo alguacil, les interrumpe: "¿Cómo nos vamos a quedar sin fiestas? Es una tradición de toda la vida. Al final las facturas se pagan". No parece convencerles.

Teodora Sanz apuesta por recuperar las fiestas pero a la manera tradicional. La asociación que preside quiere colaborar con el Ayuntamiento en algunas actividades. "Podemos ayudar en la decoración de las carrozas del desfile o preparar la degustación de comidas". Los cazadores, por su parte, quieren organizar también una tirada al plato. Paloma González, de 18 años, asegura que su peña, The Girls, y el resto de jóvenes lucharán porque se celebren las fiestas como venían celebrándose últimamente.

Lourdes Bollo, de 37 años y madre de dos niños, está muy preocupada. Los inviernos de Los Santos, que se encuentra a 905 metros de altura sobre el nivel del mar, son bastante fríos y teme que los pequeños se queden sin calefacción en el colegio. Se muestra tajante. Hay que pagar las facturas. Pero minutos después, se contradice: "Me da pena que mis hijos se queden sin diversión este septiembre".

En la carnicería hay opiniones para todos los gustos. A Milagros no le parece bien que una comisión vaya casa por casa a pedir dinero. La tendera replica: "¡Todo el mundo quiere fiestas, pero sin pagar nada!".

Falta poco más de un mes para las señaladas fechas. ¿Llegarán los habitantes de Los Santos a ponerse de acuerdo? Pase lo que pase, una cosa está clara: el 8 de septiembre los santeros pasearán a la Virgen de la Humosa, patrona del lugar, por las empinadas calles del pueblo. Pero, eso sí, sin alumbrado de fiestas.