Rusia modernizará su capacidad de disuasión nuclear para 2020
El presidente Medvédev adelanta detalles de su plan, que incluye un nuevo programa de defensa espacial para "tomar decisiones en situaciones políticas y militares"
El presidente ruso, Dmitri Medvédev, ha anunciado hoy los planes de modernizar el sistema de disuasión nuclear para 2020, lo que incluiría la creación de un nuevo programa de defensa espacial. En una reunión con altos mandos militares en Oremburgo, al sur de los urales, el mandatario ha señalado que la actualización de los sistemas nucleares garantizará "la toma de decisiones en diferentes situaciones políticas y militares".
El programa, que será finalizado en diciembre próximo, "creará un sistema de defensa aeroespacial", han informado la agencia rusa Itar-Tass. "Planeamos la construcción a gran escala de buques de diferentes clases, en particular, submarinos nucleares armados con misiles de crucero", señaló.
Medvédev ha hecho referencia a la Guerra del Cáucaso para subrayar la "necesidad de cumplir esos objetivos". "Hace muy poco tiempo tuvimos que repeler una agresión lanzada por el régimen georgiano. Lo que demostró que una guerra puede estallar repentinamente", ha dicho. "Los conflictos locales, llamados conflictos congelados, pueden transformarse en auténticas conflagraciones militares", ha dicho el jefe del Kremlin.
"Estabilidad, eso es a lo que aspira nuestro Estado. Y es lo que debemos defender en diferentes situaciones, si es necesario, recurriendo al uso de la fuerza militar", indicó Medvédev, que se ha mostrado partidario de que todas las unidades militares pasen a un estado "de alerta permanente".
Rearme ruso
El primer ministro ruso, Vladímir Putin, anunció recientemente un aumento del 27% del gasto asignado a seguridad y defensa en 2009, que ascenderá a 2,4 billones de rublos (70.000 millones de euros). El nuevo programa de rearme ruso incluye la puesta en servicio de misiles balísticos intercontinentales, submarinos nucleares y aviones estratégicos, la conocida como tríada nuclear, en un intento de mantener la paridad con Estados Unidos.
La semana pasada Rusia ensayó con éxito el lanzamiento de un misil intercontinental Bulava de 8.000 kilómetros de alcance que armará su flota de submarinos atómicos de última generación. Los misiles, de 30 toneladas de peso, son casi imposibles de abatir por los sistemas de defensa aérea existentes debido a su alta velocidad y la capacidad de modificar sobre la marcha su trayectoria para burlar radares y antimisiles.
Aunque las tropas rusas no necesitaron más que unas horas para repeler la ofensiva georgiana sobre Osetia del Sur, el grueso del armamento ruso es obsoleto, según varios expertos.
Rusia anuncia fuertes inversiones en Venezuela
Cinco compañías rusas dedicadas a los hidrocarburos -petróleo y gas- van a invertir "miles de millones de dólares" en Venezuela. Así lo ha anunciado hoy el ministro ruso de Energía, hablando de un acuerdo entre ambos países que será puesto en marcha desde ahora y hasta la primavera del año que viene. El acuerdo de inversión viene a reforzar el espíritu de cooperación que ha surgido recientemente entre Moscú y Caracas, debido, en gran parte, a la oposición del presidente venezolano, Hugo Chávez, a EE UU.
Parte de ese nuevo entendimiento, que no gusta nada en EE UU, será la participación de buques de guerra rusos, entre ellos uno nuclear, en unas maniobras conjuntas con la Armada venezolana que se van a realizar el próximo mes de noviembre en aguas del mar Caribe, es decir, a escasa millas de la costa estadounidense, maniobras que Washington no ve con buenos ojos. El crucero nuclear Pedro el Grande y el antisubmarinos Almirante Chabanenko partieron el lunes de la base rusa de Severomorsk, en Escandinavia, en dirección a Venezuela.
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