Solbes minimiza el impacto de la crisis

La crisis alimentada por las hipotecas de alto riesgo estadounidenses, que ha obligado a intervenciones extraordinarias de los bancos centrales y ha arrastrado a las Bolsas mundiales, apenas tendrá efectos "directos" en el "sólido" crecimiento de la economía española. Ésa es la principal conclusión que expuso ayer el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía, Pedro Solbes, tras presentar un informe sobre la situación al Consejo de Ministros.

El vicepresidente se muestra "convencido" de que la subida de los tipos de interés en la zona euro está a punto de tocar techo

Economía concluye que la exposición al riesgo del sistema financiero español es "extremadamente reducida"

El crecimiento económico, que apunta a una ligera desaceleración, apenas se verá afectado, según la previsión del Gobierno

Solbes compareció ante la prensa para hablar de lo que definió como "el tema de moda". Y se reafirmó en el primer análisis que, a bote pronto, hizo en los primeros días de la crisis, cuando el Banco Central Europeo (BCE) se vio forzado a conceder préstamos extraordinarios a un día por más de 215.000 millones de euros para facilitar la liquidez del sistema. "Hay que ser optimista en cuanto al impacto de la crisis en la economía española", afirmó.

Una apreciación que le llevó a reiterar las últimas previsiones de su ministerio sobre la evolución económica, publicadas a finales de julio, apenas dos semanas antes de que la crisis estallara en las Bolsas. "El crecimiento se mantendrá en tasas elevadas" dijo Solbes, quien apuntaló su afirmación con los datos del primer semestre, en el que el PIB acumula un alza anual superior al 4%. "Pero habrá una suave desaceleración", añadió.

Sin cambios

El vicepresidente insistió en la idea de que "no hay que tocar el cuadro macroeconómico" previsto por el Gobierno, pese a las "turbulencias en los mercados financieros". Unas grandes cifras que auguran un incremento del 3,8% del PIB este año (una décima menos que en 2006) y que la desaceleración se hará sentir en 2008, con un crecimiento del 3,3%.

A juicio de Solbes, buena parte de las predicciones de su ministerio son ya algo más que un esbozo. "Hay un reequilibrio del patrón del crecimiento, con menos actividad en la construcción y un mejor comportamiento de la industria, la inversión está en cifras importantes y la productividad sigue su progresiva recuperación".

Al repasar cuáles han sido los efectos "directos" en España de los problemas de liquidez de los mercados financieros internacionales, el análisis de Solbes fue tajante. "La exposición del sistema financiero español a la crisis es extremadamente reducida", dijo tras destacar que el FMI había reconocido en un reciente informe "la transparencia, prudencia y la elevada competencia" en el sector financiero español.

Sobre la participación de inversores españoles (bancos, cajas, fondos de inversión o fondos de pensiones) en el mercado de títulos de deuda respaldados por hipotecas basura, señaló que, a la vista de los datos recopilados por Economía, la CNMV y el Banco de España, "es poco significativa". Y en referencia al mercado hipotecario español, el vicepresidente segundo del Gobierno destacó el "diferente tratamiento" que da EE UU a estos créditos. "Aquí la concesión de hipotecas está mucho más reglada, y la tasa de morosidad está en mínimos históricos".

Solbes da mayor importancia a los "efectos indirectos". Es decir, a que la crisis afecte el crecimiento económico de EE UU y la UE y eso se deje sentir en el sector exterior español. "Eso sí puede tener incidencia, aunque limitada".

La tormenta financiera ha puesto en primer plano la actuación del BCE, al que varios países, con un Gobierno francés a la cabeza, reclaman que no suba los tipos de interés (ahora en el 4%). "Yo he respetado siempre la independencia total del banco central", opuso Solbes, quien se mostró comprensivo con la disyuntiva que afronta el presidente de la entidad, Jean-Claude Trichet.

"En el BCE no son autómatas, no toman decisiones sin tener en cuenta la realidad", defendió el vicepresidente, quien admitió que "ahora existe mayor incertidumbre sobre cómo va a comportarse". En todo caso, Solbes dijo estar "convencido" de que "la parte fundamental del recorrido al alza de los tipos se ha producido ya, y por tanto también del Euríbor". El índice de referencia para las hipotecas ha alcanzado en agosto el 4,66%, el máximo mensual desde 2000.