Polémica por una ayuda de la Generalitat al editor Eliseu Climent
La concesión se une a la polémica generada por un informe de la Sindicatura de Cuentas donde se cuestionan las asignaciones a dedo que un organismo autónomo concedió entre 2007 y 2008
Nunca una reacción contraria al referente en la lucha, pero sí cierto estupor, sobre todo por la cantidad y por la forma como se concedió. Así reaccionaron ayer algunas entidades catalanistas valencianas al hecho de que la Generalitat de Cataluña decidiera otorgar ayer -en su última reunión antes de las vacaciones- una subvención a dedo de 495.000 euros a Acció Cultural del País Valencià (ACPV) para "fomentar la lengua y la cultura catalana". El consejero de Turismo catalán, Josep Huguet, que ayer ejercía de portavoz del Ejecutivo, defendió la subvención a la entidad que preside el editor Eliseu Climent -así como otra, de 1,2 millones de euros, para un festival de teatro en Perpiñán- y la justificó, irónicamente, por "cosmopolitismo transfronterizo".
La ayuda a Climent, que durante años ha gozado de cuantiosas subvenciones de la Generalitat catalana, fue recibida con sorpresa por otros activistas de la Comunidad Valenciana. Pese a que reconocen la labor de Climent como pionero en la defensa del catalán, critican que las ayudas "siempre recaigan en los mismos", según Diego Gómez, presidente de Escola Valenciana.
"Tras tantos años, empieza a haber la sensación en muchos sectores de que ACPV no ha sabido expandir su labor ni ser referente para aglutinar la causa, crear un tejido social que pudiera dar respuesta a lo que estamos viviendo con el PP", prosigue Diego Gómez. Esa opinión, "que comparten otros grupos y plataformas", crea, según Gómez, en sectores catalanistas valencianos la sensación de "que hay más cosas que Acció Cultural, que el fenómeno es más rico y más ligado a la realidad del País Valencià".
La ayuda de casi medio millón de euros que la Generalitat catalana ha decidido otorgar a ACPV saldrá del Departamento de Cultura. La concesión, que se ha hecho sin concurso público, se une a la polémica generada por un informe de la Sindicatura de Cuentas donde se cuestionan las asignaciones a dedo que un organismo autónomo de este departamento concedió entre 2007 y 2008. "Todo esto es una fotografía del pasado", argumentó ayer Huguet.
Babelia
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