América Latina tiene voz en Europa
Dos ferias (Arco, ya consolidada, y ArtMadrid, emergente aunque celebra su segunda edición) se disputan un lugar en la lanzadera que catapulte el arte latinoamericano al mercado internacional
Madrid acoge estos días, del 15 al 19 de febrero, dos ferias de arte simultáneas, con una prioridad en común: la difusión del arte contemporáneo latinoamericano. Entre Arco, una feria reconocida dentro del circuito internacional y más que consolidada con 26 años de historia, y ArtMadrid, joven y emergente -celebra su segunda edición-, suman en total 32 galerías latinoamericanas. Y es que América Latina tiene cada vez más voz en Europa.
Hace unos años, Miami y Nueva York eran las principales plataformas comerciales del arte latinoamericano. Ahora, ferias como Arco, que ya ha dedicado varias ediciones a países latinoamericanos (México, 2004) y lo seguirá haciendo (Brasil, 2008), y otras como ArtMadrid, que apuesta plenamente por América Latina, se han propuesto convertirse en la puerta de entrada a Europa.
ArtMadrid es la cara más joven en esta cruzada por la proyección internacional del arte contemporáneo latinoamericano. Nació en 2005 con la idea de completar la oferta que existía en el mercado español con una propuesta que incluye desde vanguardias históricas, artistas consagrados de los 70 y 80, hasta últimas tendencias; eso sí, siempre dando prioridad al soporte tradicional: pintura y escultura.
Hace unos años un grupo de 17 galerías españolas, algunas provenientes de Arco, creyeron que había un hueco que cubrir en el mercado español. “Un sector del coleccionismo privado estaba desatendido en ese momento”, explica Gema Lazcano, directora de ArtMadrid. Así surgió una feria ideada para completar la oferta existente en Arco, cubrir las necesidades de los coleccionistas y convertirse en un referente para el arte iberoamericano. Y no les fue mal: el primer año comercializaron obras por un valor de siete millones de euros y tuvieron 15.000 visitantes.
En esta segunda edición, Art Madrid ha doblado su espacio expositivo y el número de galerías, 78, con especial presencia de representantes latinoamericanas (7) y destacadas galerías portuguesas. En total participan 20 galerías internacionales y 58 nacionales.
ArtMadrid aspira a que entre un 25% y un 30% de las galerías que exponen sean latinoamericanas. Este año, entre todas las galerías iberoamericanas destaca la presencia de las portuguesas São Mamede, Antonio Prates, Prevé y Quattro, además de las colombianas El Museo-Fernando Pradilla y Quinta Galería, las galerías mexicanas Óscar Román y Praxis y la cubana Servando.
La otra cara de la moneda es Arco. Simboliza la consolidación y el prestigio internacional y se erige como plataforma del mercado artístico español. Esta edición, de “transición” como la ha definido la directora de la feria, la donostiarra Lourdes Fernández, reúne a 271 galerías, de las cuales 25 son latinoamericanas. Arco mostrará este año algunas pinceladas de lo que pretende potenciar de cara a próximas ediciones: la calidad de las galerías, la internacionalización y el coleccionismo individual y corporativista.
En esta edición, un grupo de artistas de Brasil y Paraguay participan junto a Cabo Verde y Etiopía en el proyecto ArteInvisible, que auspicia el Gobierno español. El comisario de la parte latinoamericana de la muestra, el antropólogo paraguayo Ticio Escobar, afirma que esta iniciativa es importante no sólo por el apoyo que presta a las “expresiones artísticas alternativas”, sino porque “confronta puntos de vista diferentes” entre el arte de varios lugares del plantea.
Atrás queda la polémica suscitada el año pasado tras el nacimiento de ArtMadrid, que se celebra los mismos días que Arco. Pero este paralelismo no es casual. Según los responsables de ArtMadrid, esta feria contribuye a potenciar la importancia de España dentro del mundo del arte contemporáneo, que se convierte así durante una semana en la capital europea del arte más vanguardista.
Ésta es la tendencia en el panorama internacional: Basilea tiene cinco ferias y Miami nueve, que se celebran paralelamente. Hay quienes consideran que ésta es una oferta artística excesiva y que a duras penas los coleccionistas tienen tiempo de verlo todo. Y mucho menos de disfrutar. Otros, en cambio, celebran la riqueza cultural que conlleva la concentración de varias ferias multidisciplinarias y creen que facilita al visitante el acceso en varios días a la oferta artística internacional.
Arco, que en su día no vio con buenos ojos la celebración de una feria simultánea, se desmarca de opinar sobre la existencia de ArtMadrid. El mercado es libre y cada uno busca su hueco, pero Arco es tajante al señalar que no tienen nada que ver.
El caso del galerista colombiano Fernando Pradilla es la muestra de que dos ferias de arte contemporáneo que se celebran en los mismos días en la misma ciudad no son un obstáculo para el mercado del arte. Pradilla dirige dos galerías: El Museo, en Bogotá, y Fernando Pradilla, en Madrid. Vive a caballo entre las dos capitales, pero eso tampoco es ningún impedimento para este galerista, que a raíz de la crisis económica y política que vivió Colombia en los 90, decidió promover el arte latinoamericano desde Madrid.
Las dos galerías que dirige tienen perfiles distintos: la madrileña participa este año en Arco con el objeto de difundir el arte contemporáneo iberoamericano más emergente. La colombiana en cambio representa a artistas consagrados y participa en ArtMadrid. “En Madrid hay hueco para las dos ferias, creo que pueden cohabitar, tienen identidades diferentes”, explica Pradilla, a la vez que recalca que España tiene una posición muy interesante para la promoción del arte latinoamericano en Europa porque “está viviendo un desarrollo muy importante en el mercado artístico”.
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.