"Los gobiernos deberían considerar que las tecnologías ya no son un lujo sino un derecho"
El cantante catalán opina sobre las nuevas tecnologías y las necesidades que crean
El compromiso social de Antonio Orozco brota en cada una de sus palabras. El músico catalán no sólo reivindica el respeto por los derechos del ser humano a través de sus canciones, sino que, puestos a hablar de tecnología, su mayor preocupación es el retraso que sufren los países del Tercer Mundo, sin posibilidades reales de franquear las barreras que les separan del desarrollo tecnológico.
“Los gobiernos deberían considerar que las tecnologías ya no son un lujo sino un derecho”, protesta Orozco, que señala que gran parte de la humanidad no puede sufragar los elevados costes de los nuevos avances técnicos, sin los cuales muchos países se verán condenados al subdesarrollo y serán incapaces de superar su situación de pobreza.
El cantante apuesta por los nuevos medios de comunicación nacidos de la revolución que ha supuesto internet, desde el correo electrónico hasta los blogs, herramienta que le permite estar en contacto directo con sus fans y que ha desatado su nueva faceta de blogger. Como buen amante de la música, no falta entre sus pertenencias un Ipod, que, unido a unos altavoces, se ha convertido en el equipo de música que le acompaña en las habitaciones de hotel.
Desde que comprara su primer ordenador personal hace ya 20 años, las anécdotas y los trastornos ocasionados por los fallos técnicos le servirían para escribir unas cuantas canciones: “Grabamos mi primer disco (Un reloj y una vela, 2000) con un sistema Macintosh y por nuestra falta de experiencia no teníamos ni siquiera un estabilizador de corriente, así que en mitad de la grabación se nos fue al traste un día entero de trabajo”.
Antonio Orozco acaba de publicar su cuarto álbum de estudio, Cadizfornia, un proyecto en el que ha volcado todas las experiencias que ha vivido en los dos últimos años y que responde al recorrido entre Cádiz, la ciudad de la que han partido sus discos anteriores, y California, el escenario que cerró su última gira.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.